Juan José Ballesta rompe su silencio tras ser exculpado de agresión sexual: «Me han crucificado»

Pero lejos de parecer que el caso llegaba a su fin con la no culpabilidad de Ballesta, la magistrada tomaba la decisión de continuar con la investigación para esclarecer los hechos de los que se acusaba al actor y a un conocido suyo. En varios meses iban a tener lugar nuevas diligencias como la declaración de otra testigo; sin embargo, los acusados han visto esclarecido su caso antes de lo previsto al rechazar la juez a procesar a Juan José Ballesta por agresión sexual por falta de pruebas.

«Ha sido un año y pico muy duro para mí. La verdad, me ha cerrado muchas puertas a muchos trabajos. Luego a nivel psicológico y mental lo he pasado muy mal. La verdad siempre sale y estoy muy agradecido a los que me han ayudado. No voy a ir en contra de nadie porque si la chica se decía que tenía problemas, lo que no voy a hacer es echarme más problemas. Voy a intentar dejar todo atrás lo antes posible», ha reconocido Juan José Ballesta en la rueda de prensa que ha tenido lugar este mediodía.

Tal y como ha reconocido, para él saber la noticia «ha sido un alivio». «Porque ha sido un año y medio muy malo. La gente en la calle que no te conoce te tacha, todo el mundo te juzga, me escriben por Instagram. Lo he pasado realmente mal. Me han crucificado», confiesa lo que ha vivido durante este tiempo en el que ha tratado de buscar trabajo recibiendo como respuesta «no trabajamos con agresores sexuales».

Pero aunque no en la actuación, el intérprete reconoce que no le ha faltado trabajo en otros sectores. «No he tenido miedo en ningún momento porque no he hecho nada, pero sí que he tenido mucha pena por esta muchacha, pena por mi hijo también porque le han preguntado mucho, por mi familia, por mi madre», ha expresado. Según han comunicado, contar con el testimonio de una amiga de la propia denunciante que no fue solicitado por la defensa del actor ha terminado de esclarecer su inocencia al corroborar que no se encontraba en el lugar de los hechos. Tras sus declaraciones, en un auto de 16 folios se puso fin a la investigación «entendiendo que ya había quedado todo concluido».

Ahora, sus abogados esperan que él «pueda volver a tener trabajo y que se recupere lo antes posible. Confiamos que con tiempo y con toda la gente que le ha apoyado pueda volver a hacer su vida de antes». «Entendemos que con esto habría que finalizar y que si efectivamente la chica no está bien, pues que reciba el tratamiento que tenga que tomar y que él pueda continuar con su vida», ha declarado la abogada de Ballesta. «Ha sido un procedimiento complicado pero bueno ya estamos viendo casi casi la luz al final del túnel», concluyó su defensa en la rueda de prensa.

Tal y como se daba a conocer en las últimas horas, la magistrada de Primera Instancia e Instrucción número 4 de Parla concluía el sumario de investigación abierto «sin procesamiento» tras considerar que la versión de la denunciante presenta «múltiples» contradicciones «sin que existan elementos que apoyen su testimonio». Según el auto, «no se deduce la existencia de indicio racional alguno de criminalidad» frente a ninguno de los investigados. Rechazada en un principio por la instrucción que la acusación de la denunciante fuese fruto de la esquizofrenia que padece, la juez alude que «desde el punto de vista médico forense resulta verosímil que la mujer presentase alteradas sus capacidades cognitivas y volitivas en el momento de los hechos», cuando llevaba un tiempo sin tomar la medicación.

Así, la conclusión es clara: «Concurren en el presente caso motivos para considerar que los hechos puedan ser a consecuencia de sus problemas de salud mental, la falta de medicación y el consumo de sustancias estupefacientes y bebidas alcohólicas que ella misma reconoció». Las alteraciones entre las declaraciones de la mujer que no se sostienen ni «persisten en aspectos esenciales» y la ausencia de elementos que corroboren objetivamente su testimonio han sido suficientes para exculpar al actor de juicio y cargos. Una decisión que enorgullecía al equipo de abogados que ha trabajado con Juan José Ballesta. El mismo que ha trabajado también para defender a la familia de Edwin Arrieta, por ejemplo.