Joaquín Torres y Raúl Prieto: un divorcio sin cuentas pendientes y dos caminos opuestos

Tras el anuncio, la duda que ha saltado es sobre cómo se llevará a cabo el futuro divorcio. Sin embargo, lejos de convertirse en un proceso largo y tedioso, las cuestiones económicas parecen no suponer un obstáculo para ambos. ¿El motivo? A pesar de los años juntos, nunca consolidaron un patrimonio en común. Su enlace no se tradujo en sociedades compartidas ni en propiedades a nombre de ambos. Además, según revela 'Vanitatis', el patrimonio de cada uno se ha gestionado siempre por separado. De hecho, el exdirector de 'Sálvame' solo llegó a participar en una de las sociedades del arquitecto como administrador mancomunado hasta 2021.

Por su parte, Prieto cuenta con una única propiedad a su nombre: un piso de 100 metros cuadrados en Las Letras, adquirido en 2012. Mientras que la exclusiva vivienda que ambos compartieron pertenecía exclusivamente a Joaquín Torres, además de un inmueble de 400 metros cuadrados en el barrio de Salamanca.

Cabe resaltar que Joaquín cuenta con un notable patrimonio inmobiliario, con propiedad en Madrid y Galicia, así como un negocio de alquiler vacacional de lujo. Además, a ello se suma su reconocida trayectora como 'el aquitecto de lo famosos', llegando a tener clientes como Madonna, Crisitiano Ronaldo, Alejandro Sanz o Amancio Ortega.

Fieles a su discreción, la noticia de su separación después de meses de haber roto. «La vida es así. Para mí ha sido un palo muy grande. No lo puedo ocultar: aún no estoy bien», admitía recientemente Joaquín, quien se ha efugiado en su casa de Galicia y volcado en el trabajo, evita alimentar titulares sobre su vida sentimental.

En cambio, tras la reciente publicaciones de unas imágenes en 'Look', donde se ve a Prieto disfrutando de sus vacaciones en compañía de un nuevo galán, todo apuntaria que el periodista habría encontrado una nueva ilusión y se trataría de sería un doctor en medicina estética de Barcelona, «muy integrado en su círculo de amistades», según menciona 'Vanitatis'. Fuentes consultadas por el mismo medio aseguran que se conocieron gracias a amigos en común y que la relación avanza con discreción.

En definitiva, mientras uno trata de recomponerse de un año marcado por el dolor, el otro encuentra un soplo de aire fresco en un nuevo comienzo. Dos caras opuestas de una misma moneda que reflejan el final de una etapa y el inicio de otra.