Javier Rigau, exmarido de Gina Lollobrigida: «Está incapacitada por todas las instancias judiciales»

A pesar de que explican que Gina ha tomado esta decisión porque ya no confía en los políticos y quiere dar voz al pueblo italiano, la realidad podría ser totalmente diferente. Así lo asegura el que fuera su marido, el empresario Javier Rigau, en conversación con ABC: «Gina públicamente ha sido una persona de derechas y en privado de súper derechas. Todo este ridículo se debe a un abogado, un exfiscal muy desacreditado que luego se metió a político y que finalmente contrataron como letrado después de cambiar hasta en cinco ocasiones».

El catalán tiene muy claro que las presuntas pretensiones de Lollobrigida no llegarán a buen puerto. Recuerda que la intérprete de 'Salomón y la reina de Saba' «está incapacitada por todas las instancias judiciales porque su estado mental así lo hace necesario y se le ha nombrado desde el primer momento un administrador de apoyo precisamente para defenderla del expolio al que ha sido sometida por Andrea Piazolla, imputado en varios procedimientos penales instados por mí, como marido, por su hijo y su nieto, ya que siempre hemos estado muy unidos y actuamos los tres», explica.

Rigau se refiere a las batallas judiciales que iniciaron contra el joven Andrea que pasó de ser un miembro del servicio de Lollobrigida a ser nombrado factótum y representante. Una decisión muy cuestionada por sus familiares directos quienes tacharon este movimiento como un intento desesperado por hacerse con su fortuna: «Considero al igual que Milko (hijo) y Dimitri (nieto) que todos deberíais dejar en paz a una persona incapacitada por sentencia firme y que además de haber sido apartada por su doméstico de su familia a través de la 'técnica de la persuasión de la mente' y expoliada hasta extremos que ya están probados por fiscalía en los varios procedimientos abiertos contra Piazolla y su familia, no merece que se le denigre más públicamente. Pido respeto para la mujer con la que he compartido el 80% de mi vida».