El arrepentimiento de Janelle Monáe tras publicar un vídeo recreando el incidente de Michael Jackson y su hijo en un balcón

Hace unos días, Monáe compartió un video en el que recreaba el infame incidente de noviembre de 2002 cuando Michael Jackson, desde el balcón de su suite presidencial en el Hotel Adlon de Berlín, suspendió a su hijo pequeño, Bigi Jackson sobre el vacío. En su versión, Monáe, vestida con una camisa roja y una peluca negra al estilo del Rey del Pop, sostenía un perro robótico en lugar de un bebé. La escena, que pretendía ser humorística, no fue bien recibida por muchos de los fans de Jackson, quienes la consideraron una burla insensible a un momento difícil en la vida del fallecido artista.

El incidente original había causado una gran conmoción en 2002. Jackson, queriendo mostrar a su hijo a los medios y a sus seguidores, lo colgó por encima del balcón, lo que provocó una reacción inmediata de preocupación y desaprobación por parte del público. Jackson se vio obligado a disculparse posteriormente, admitiendo que había sido un error. Este momento se ha mantenido en la memoria colectiva como uno de los momentos más cuestionables en la vida del cantante.

Las críticas hacia Monáe no se hicieron esperar. Un usuario de X (antes Twiiter) escribió: «Que Janelle Monáe no tenga clase y ahora se ponga a atacar a Michael Jackson, que lleva muerto más de 15 años, es tan patético como triste. Janelle, espero que jamás tengas que enfrentarte a su hermana, Janet Jackson, porque lo que has hecho es enfermizo y de mala persona y lo sabes». Otro comentario en la misma plataforma decía: «No entiendo qué hizo que Janelle Monáe pensara que era una buena idea recrear un momento tan bajo en la vida de Michael Jackson 22 años después de que sucedió y 15 de su muerte».

Aunque algunos seguidores de Monáe defendieron su video, calificándola de «icónica» y «graciosísima», la mayoría de las reacciones fueron negativas. Ante la avalancha de críticas, Monáe optó por borrar el video sin ofrecer una explicación de por qué había decidido recrear ese momento en primer lugar.

Este incidente deja claro que, aunque la intención pueda ser humorística, tocar temas sensibles relacionados con figuras públicas fallecidas puede generar reacciones intensas y divisivas entre el público.