Jaime Peñafiel recuerda el peor momento de su vida: la muerte de su hija por la droga

«Yo he tenido muchas desgracias, a mí se me ha muerto mi hija Isabel con 21 años, por las drogas», ha confesado y, después, continuaba contando la anécdota que vivió ese día de junio de 1995 con el general Sabino, que fue jefe de la casa real. «El día que muere mi hija, hacían pocos días que se le había muerto su sexto hijo. Tuvo diez hijos y se le murieron seis. Me vino a dar el pésame y me dijo que lo mío era peor porque se me había muerto mi única hija y a él todavía le quedaban cuatro...", contaba Jaime.

«Cuando se muere una hija, la única, eso es terrible. Ha sido lo peor que me ha pasado en la vida», afirmaba Jaime Peñafiel. «Es una herida que se me abre continuamente», aseguraba el hombre que más sabe sobre los miembros de la Casa Real.

Hay algo que lamenta y es el papel que asumió entonces, a diferencia de su mujer: «Me negué a verla porque tenía pánico a ver su cadáver. Fue su madre la que asumió todo, cosa que también me avergüenza. Tampoco podía hacer nada. Es algo que no he superado, que me perseguirá siempre», confesaba apenado.

«El rey Juan Carlos me llamó enseguida, la reina no. Tardó un mes en darme un pésame y lo hizo con una carta. Siempre ha sido muy digna, una gran sufridora, pero aquello me dolió mucho», confesaba. «Le pedí una audiencia cuando me enteré de que mi hija estaba enganchada porque necesitaba hablar. Ella no me contestó y le pasó la carta al Rey», algo que Jaime sigue sin perdonarle a día de hoy a la reina Sofía.

Jaime Peñafiel también hablaba del dolor físico, en concreto, un herpes zóster que se produce por el virus de la varicela, tal y como contó Carmen Lomana, que también lo tuvo. «Tuve un herpes desde el pecho hasta la espalda y me duró seis meses», ha contado. «Carmen (su mujer) sufría, sin poder hacer nada e intentaba ayudarme, pero no podía».