El imperio comercial de Gwyneth Paltrow llega a su ocaso: rebaja de precios, despidos y una fracasada diversificación

Con sus reconocidos papeles en la interpretación, la opinión pública atribuía el éxito de la marca de Paltrow a una dirección en la que ella no tendría tiempo de mediar. «Creo que nadie piensa que sea yo de verdad la que dirige mi empresa. Creo que la gente piensa que solo soy la cara visible», aseguraba en una entrevista para 'The New York Times' en 2023. Ese año, la empresa de bienestar y estilo de vida de la que Gwyneth es directora ejecutiva tenía más de una década de salud y todo un abanico de servicios que respondían a diferentes necesidades. Pero ya entonces la actriz vaticinaba su propio destino empresarial. «No creo que pueda dedicarme a esto para siempre», dijo en la misma ocasión.

Ahora, la prensa ha puesto el foco en el que puede ser el final del imperio Goop, al que atribuyen el arrastre de una agonía en el último año. «¿Está a punto de caer el imperio Goop de Gwyneth Paltrow?», tituló 'Grazia'; «¿Por fin se le está quitando el efecto dorado a Goop?», apuntó también 'The New York Post'. Lo cierto es que existen varias evidencias que demuestran que la marca de la intérprete no vive en el presente su mejor momento haciendo frente a serios problemas. Cuando Paltrow emprendió su marca en el negocio era una novedad, pero ahora la masificación del mercado del bienestar, la excesiva para los expertos expansión de la marca, y la noticia del regreso a la actuación de la estadounidense después de cinco años alejada de la misma hacen sospechar que la posible subida de ingresos de la marca que se esperaba para este año no es la realidad de una empresa que se tambalea.

«Bueno, tal vez pueda explorar mi propia creatividad nuevamente», dijo la actriz a la hora de afrontar ponerse en la piel de un nuevo personaje que podría distanciarla de su faceta como empresaria. Paltrow supo ver cómo hacer dinero con ideas revolucionarias hasta el punto de que Goop fue valorada en casi 250 millones de euros, pero ahora no escapa de las señales que restan al proyecto pocos días de gloria. Después de atravesar dos en 2024, antes de finalizar el año la marca ha llevado a cabo una tercera ola de despidos en la plantilla, 216 en total desde septiembre, debido a una crisis que ha requerido recortar personal para reestructurar el negocio hacia la belleza. Mientras los portavoces del negocio se negaban a tratar en público la rentabilidad del mismo, Goop se veía envuelto también en un problema legal después de que la marca de salud sexual Good Clean Love interpusiese una demanda por no respetar su registro de identidad al lanzar una línea de productos con un nombre similar.

Sumado a esto, la oferta comercial de la estadounidense tampoco sería ya la apuesta que la encumbró a la cumbre del mercado del estilo de vida. Las ventas de su último lanzamiento de línea de productos de suplementos y cuidado de la piel tenía un precio menor al que estaban acostumbrados los clientes de la actriz y aun así fracasaron. Esta Navidad, fecha en la que Paltrow saca al mercado su tradicional y extravagente lista de regalos, donde el año pasado destacó un dildo de oro de 24 quilates que costaba más de 10.000 euros, no tendría además el mismo espíritu por el negocio navideño, pues en su oferta todo ha sufrido una rebaja en los precios y los que propone, un vibrador que reproduce canciones o una gorra de béisbol que estimula el crecimiento de cabello, no estarían a la altura de anteriores fiestas.

Además de la demanda, los posibles bajos ingresos o los despidos, los expertos encuentran en la diversificación del negocio de Paltrow el mayor de sus problemas. Lo que empezó como un blog en la cocina ahora es un pódcast, una línea de productos de belleza, una marca de ropa, varios programas en Netflix, algunas tiendas, una cadena de comida para llevar, un crucero de lujo y una serie de conferencias. Con su situación actual, 'Business Insider' advertía que los planes de la empresa era dejar de lado aquello que ya genera pérdidas, como la atención en el bienestar sexual, para apostar solo por la belleza, moda y alimentación. Sinónimo de imperio, Gwyneth ha logrado hacerse con un patrimonio estimado de casi 200 millones de euros. Sin embargo, cada vez tiene más claro el final de su negocio. En su entrevista a 'The New York Times' admitió que a su madre le había prometido hacer teatro después de vender la empresa, devolver el dinero a sus inversores y vivir plenamente sus años de «anciana sabia» cocinando, trabajando en su jardín y siendo abuela.