La icónica mansión de las Kardashian a la venta: seis habitaciones, jacuzzi y un spa privado

La vivienda valorada en 13,5 millones de dólares, se extiende a lo largo de 822 metros cuadrados y está ubicada en un terreno de 6270 metros cuadrados. Si bien actualmente está deshabitada, se ofrece completamente amueblada por un costo adicional de 400 mil dólares.

Desde su característico vestíbulo con baldosas en blanco y negro hasta la icónica escalera imperial de hierro negro, la mansión es un recuerdo tangible de los momentos más memorables en la historia de las Kardashian. Según TMZ, el vestíbulo fue el escenario de una de las escenas más recordadas del reality: el día que Kris llevó un cerdo a casa como regalo para Kylie Jenner, quien pensó que era un pollo.

La casa fue construida en 1998 y fue adquirida por Kris y su entonces marido, Caitlyn Jenner por 4 millones de dólares, con el objetivo de formar un hogar con sus pequeñas hijas, Kendall y Kylie, y recibir a los hijos mayores de Kris: Kim, Kourtney, Khloé y Rob, con la finalidad de mantener la unión familiar.

El diseño refleja el glamoroso estilo de vida de a familia, con espacios amplios, techos altos y grandes ventanales que dejan entrar la luz natural en todos los ambientes. La mansión cuenta con seis habitaciones, entre ellas la suite principal que incluye chimenea, bar, gimnasio privado, baño tipo spa y un balcón con vistas. Además, el resto de dormitorios cuentan con baño privado, garantizando la privacidad de los miembros del clan Kardashian-Jenner.

En tanto, el patio trasero es otro de los grandes atractivos de la propiedad. Cuenta con una piscina, un jacuzzi, cabaña de entretenimiento con sofás, televisor y chimenea, y una barbacoa al aire libre con un comedor cubierto. Además, también posee una fogata y un gazebo rodeado de plantas, convirtiéndolo en un espacio acogedor.

Por otro lado, otro de los espacios más icónicos del programa fue la cocina, la cual está equipada con una isla central blanca, una mesa de desayuno y refrigeradores grandes con puerta de vidrio. Además, la despensa incluye una máquina personal de yogur helado.

Cabe resaltar que, antes de poner la casa en venta, Kris Jenner contrató al diseñador de interiores Ryan Saghian para renovar los muebles con piezas de lujo, incrementado aún más el valor de la mansión, cuya decoración incluye exóticas obras de arte.

Tal y como describe el agente inmobiliario, Tomer Fridman, quien está a cargo de la venta de la propiedad a través de Christie's International Real Estate, el lugar es «el epítome del lujo y la elegancia», además de ser escenario de los momentos más icónicos del clan Kardashian-Jenner, como bodas, divorcios y el crecimiento de cada una de las socialité.

Con esta venta, Kris Jenner marca el fin de una era caracterizada por el drama, el glamour y el crecimiento de una de las familias más queridas e influyentes de Hollywood.