Amaia Montero hizo saltar todas las alarmas, el pasado 14 de octubre, cuando publicó una instantánea en blanco y negro en la que aperecía despeinada, sin maquillar e irreconocible. Aunque la preocupación aumentó cuando escribió, junto a la fotografía, que «Si la esperanza es ... lo último que muere y todavía no la he perdido, ¿de qué me sirve la vida?». Algo que, sumado a algunas de las desconcertantes respuestas que emitió, originó una alerta sobre su estado de salud.
Con objeto de saber que le ocurría a la célebre cantante, ABC se puso en contacto con Idoia Montoia, su hermana, quien optó por guardar silencio y no dar declaraciones al respecto. Durante las cinco semanas que han trascurrido desde entonces, son pocos los han querido detallar cómo se encuentra la artista. Aunque algunos miembros de su círculo más cercano aseguraron, en 'Socialité' que no atraviesa un buen momento personal y que ha decidido regufiarse en Irún, su localidad natal, en compañía de su madre y sus hermanas.
El último en hablar de esta delicada situación ha sido Gonzalo Miró. El exnovio de Amaia Montero ha manifestado que la cantante «es una gran persona» y que «tiene un corazón que no le cabe en el pecho». Además, y pese a que no ha querido entrar en detalles, el presentador de televisión ha expresado que «todos tenemos malas épocas».
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