Denise Richards rompe su silencio con un desgarrador testimonio y Aaron Phypers contraataca en los tribunales: «Ella miente»

«Me siento genial. Mi abogado está haciendo un trabajo increíble. Él la está exponiendo. La verdad te hará libre», declaró Phypers a 'Daily Mail' antes de ingresar a la sala, mostrando una actitud serena y desafiante frente a los señalamientos. Su defensa busca desmontar las versiones de Richards, quien días antes aseguró haber sufrido múltiples conmociones cerebrales y amenazas durante su relación.

El 7 de octubre, la exestrella de 'The Real Housewives of Beverly Hills' relató ante la jueza que su exmarido la había golpeado en distintas ocasiones, dejando graves secuelas físicas y emocionales. La actriz afirmó haber padecido al menos tres conmociones cerebrales como consecuencia de los presuntos ataques, uno de ellos ocurrido en enero de 2022, cuando terminó con un ojo morado. En otro episodio, entre marzo y mayo del mismo año, aseguró que Phypers «me empujó contra una pared de concreto y golpeó mi cabeza» en el estacionamiento del centro de bienestar que él dirige.

El tercer incidente, relató, habría ocurrido en abril de este año, durante una estancia en un hotel de Chicago, cuando —según su testimonio— Phypers «me estaba apretando la cabeza tan fuerte que sentía que me estaba aplastando el cráneo». Entre lágrimas, recordó haberle suplicado: «Por favor, para, me estás lastimando».

Richards describió ante el tribunal que los síntomas posteriores incluían fuertes dolores de cabeza, náuseas y sensación de mareo. También señaló que el propio Phypers la examinó con equipos de su centro tras los supuestos ataques. «Él me escaneó, y apareció que tenía una conmoción cerebral», declaró la actriz.

En su versión, la intérprete aseguró además haber sido estrangulada, abofeteada y amenazada de muerte. Durante la audiencia se proyectó un audio privado que ella misma grabó, donde se la escucha decir: «Te he dado todo. Me has golpeado demasiadas malditas veces y cada vez es peor». Según los reportes de 'Daily Mail', la actriz se mostró visiblemente afectada al escuchar el material.

Aaron Phypers tomó la palabra el 8 de octubre para ofrecer su versión y negar de manera tajante los señalamientos. «Nunca lastimé físicamente a Denise Richards… nunca la amenacé con hacerle daño… nunca amenacé con matar a nadie», afirmó ante la corte.

El actor calificó de «inventadas» las declaraciones de su exesposa y aseguró que todo formaba parte de una estrategia mediática. «Todo está inventado. A mucha gente le gusta estar cerca de las estrellas. Harán cosas por ellas», comentó, según recoge 'People'.

Cuestionado sobre los insultos que presuntamente le habría dirigido a Richards durante su separación, Phypers respondió: «Nunca la llamé así. Nunca la llamé perra. La llamé mentirosa, sí. Pero no perra». También rechazó haberle causado heridas o haber utilizado aparatos médicos para diagnosticarle conmociones cerebrales: «No hice eso, ni usé ningún equipo de mi centro para revisarla por una conmoción, como ella afirmó».

El actor sostiene que la verdadera víctima de acoso es él, y que tras obtenerse la orden de restricción temporal a favor de Richards el pasado 16 de julio, la actriz lo habría contactado «al menos 17 veces en una semana», algo que su defensa presentó como prueba ante la jueza. «Hay una noción allá afuera de 'creerle a las mujeres'… ¿pero a todas? Yo creo en las mujeres, pero algunas mienten. Y esta, ella está mintiendo. Todo quedará expuesto pronto», manifestó Phypers al salir del tribunal.

El proceso legal entre Denise Richards y Aaron Phypers continúa sumando capítulos. Desde que la actriz solicitó la orden de restricción temporal en julio, el caso ha acaparado titulares tanto por la gravedad de las acusaciones como por la intensidad de las respuestas del actor.

Richards sostiene que su exmarido la sometió a un patrón de violencia física y emocional, mientras que Phypers asegura ser víctima de una campaña de difamación. Ambos presentaron documentación, grabaciones y declaraciones ante el tribunal.

Por ahora, la jueza deberá decidir si concede una orden de restricción permanente contra el actor o si desestima las acusaciones, en una disputa que mantiene en vilo a Hollywood y que ha puesto bajo el escrutinio público la intimidad de una de las parejas más mediáticas de la última década.