Carmen Lomana, acusada de vender un piso en Marbella a un presunto narcotraficante

El programa 'Fiesta' ha desvelado esta información que deja a Carmen Lomana en una posición incómoda y abierta a todo tipo de especulaciones, si bien ella ha negado cualquier implicación en asuntos delictivos. Resulta que hace siete años, decidió deshacerse de una de las propiedades que tenía en la Costa del Sol, y más concretamente de un precioso ático que poseía en una exclusiva y lujosa urbanización de Marbella, su lugar de veraneo favorito.

¿Y qué pasó? Se le presentó lo que se viene a llamar como «una oportunidad de mercado». Un ciudadano de origen marroquí mostró un gran interés por la propiedad y sin muchos regateos la operación de venta terminó acordándose. La firma se efectuaría en un despacho de abogados de Madrid. Todo parecía de lo más normal.

Sin embargo, la cosa se complica cuando se descubre la identidad final del nuevo propietario. Según ha contado el programa de Telecinco, se trataría supuestamente de un conocido narcotraficante que habría participado en diversos hechos delictivos y con un largo historial.

Según los datos aportados por el periodista Saúl Ortiz, el apartamento es propiedad de una sociedad de Carmen Lomana en la que ella está registrada como administradora única. Es al efectuar la venta del inmueble cuando aparece el problema. Los nuevos propietarios están obligados a cambiar la titularidad de la propiedad y no lo hacen. Por ello, la deuda que contraen con la comunidad figura a nombre de la mismísima Carmen Lomana y así se lo hace ver la administración del vecindario.

Así que un día Carmen Lomana estaba tan tranquila disfrutando de una jornada de asueto realmente prometedora cuando recibe una llamada a su domicilio de la capital de España en la que le dicen que la policía ha entrado en el piso malagueño. Y, claro, la socialité se queda de piedra.

Saúl Ortiz se ha apresurado a advertir que en estos momentos la empresaria no tendría nada que ver con cualquier movimiento ilícito relacionado con el inmueble, según le ha insistido la propia Carmen Lomana. Es decir, estaría libre de cualquier delito de encubrimiento.

«Impagos, ambiente de inseguridad, malas influencias y mala fama en torno a la colonia y dificultades en cuanto a futuras operaciones de compra-venta» son algunos de los inconvenientes que, según un confidente anónimo, han denunciado los vecinos de la conflictiva propiedad.

«He hablado con la presidenta de la comunidad y me dice que es todo mentira», ha trasladado Carman Lomana al programa. «Deben dinero, como otros muchos», ha insistido. «Cuando recibí la información de que era un supuesto narcotraficante, no daba crédito», ha confesado.