Belén Esteban destapa la nula relación entre Jesulín y su hija: «Ni la ha llamado estas Navidades»

Belén Esteban vive un momento efervescente a todos los niveles. Su vida personal parece en orden mientras su vida profesional está disfrutando en un renovado impulso y la mujer lo celebra ofreciendo titulares a diestro y siniestro. Esta vez sus palabras han tenido como destinatario a Jesulín de Ubrique. Y lo ha puesto a caldo.

Hace ya años que Belén Esteban sacó de la ecuación pública a Andrea, quien vive en Los Ángeles totalmente alejada del foco mediático y valiéndose por sí misma, para orgullo de su madre. Lo que ocurre es que la pasión de colaboradora por su hija es tan grande que cualquier cosa alrededor de ella la enciende. Y así ha ocurrido durante el programa 'Ni que fuéramos'.

Los contertulios se encontraban hablando de las relaciones de abuelos, padres, hijos y nietos por estas fechas y entonces apareció Kiko para comentar lo que había ocurrido entre José María Almoguera y Carmeno Borrego. «¿No se le rompió el corazón a Carmen oír decir a su hijo que quería más a la abuela que a la madre? ¿Qué has hecho para que esto sea así?», preguntó en voz alta. Y allá que se fue Belén Esteban.

«Te digo que hay nietos y nietas que quieren más a su abuela. Yo lo entiendo y bien orgullosa que estoy. Muy orgullosa de que mi hija quiera más a su yaya que... ¡Vamos!», ha empezado. Suficiente para que todos se dieran cuenta de por dónde iban los tiros. Le pitaban los oídos a Jesulín. Belén Esteban daba a entender que su hija se sentía más próxima a su abuela que a su padre, sugieriendo que la madre de la colaboradora había criado con más dedicación a la joven que el torero.

Entonces ha sido cuando Kiko Matamoros, que se las sabe todas, ha metido el dedito en la herida y le ha preguntado qué le ha hecho el padre a la hija. La respuesta ha sido bien concluyente: «Ganárselo a pulso. Por no hacer ni le ha llamado en estas Navidades. Si no lo digo, reviento. Me callo por ella...». Es entonces cuando Belén Esteban ha visto que igual se estaba metiendo en un jardín y ha decidido frenar, seguramente porque a la mente le ha venido la figura de su hija y lo poco que le gusta que hablen de ella públicamente por el motivo que sea.

A cambio, Belén Esteban ha bajado un poco las pulsaciones, aunque ha seguido hablando de su hija, aunque esta vez por cuestiones diferentes. Ha contado con emoción que después de pasar la Navidad juntas se han despedido porque la joven ha tenido que regresar a Estados Unidos, donde trabaja.

«Hoy se ha ido la persona que más quiero a donde vive. Yo sé que soy muy exagerada, pero a mí cada vez me duelen más las despedidas», ha contado sobre el mal rato que ha pasado al tener que decirle ‹hasta la vista' a su adorada Andrea.

«Yo me harto a llorar. He llamado a María, a Valldeperas... Yo sé que no tengo que llorar porque es el orgullo más grande que tengo y he pasado unas preciosas Navidades, pero cuando se va se me rompe el corazón», ha lamentado. Tras lo cual no ha podido resistirse a solar el último dardo hacia Jesulín: «Es la persona que más quiero en el mundo y qué pena que hay personas que no quieran disfrutar de ella».