Las hermanas Junot: «Nuestros padres nos protegieron en su divorcio»

Como madrinas de la noche Bollinger de verano supongo que tendrán motivos para brindar.

Victoria: Me recuerda a la Navidad o los cumpleaños.

Isabelle: Mi mejor recuerdo de un brindis siempre es el que hacemos en Navidad, cuando estamos toda la familia.

¿Y si les pido ese brindis que nunca olvidarán?

Isabelle: El de mi boda con mis padres y hermanos. Cada uno vivimos en un sitio, mi madre y hermana en Estados Unidos, mi padre en Francia, mi hermano moviéndose, yo en España… No tenemos la posibilidad de poder comer los domingos en casa de mi madre y por eso hay que aprovechar las ocasiones.

¿Cómo consiguen romper las distancias geográficas?

Victoria: la tecnología ayuda pero sobre todo los viajes. No sentimos pereza de coger un avión aunque sea para una visita corta. Lo que sí tenemos por costumbre es pasar el verano y la Navidad juntos en Marbella. Mis abuelos daneses nos inculcaron esa costumbre.

¿Dónde sienten que está su casa, el lugar de los recuerdos?

Isabelle: Madrid, por supuesto. Aquí vivimos de pequeños y estudiamos y resido aquí.

Victoria: Mi casa es Madrid. Nuestros padres eligieron España como el centro familiar donde nos criáramos y hasta mi madre pasa la mitad del tiempo entre Madrid y Nueva York. De esta vida lo bueno es que los idiomas nunca han sido una barrera. Hablo cinco.

¿En qué idioma sueñan?

Isabelle: Depende del entorno en el que estés y dónde vivas, pero seguramente el más presente es el inglés.

¿Han aprendido a suplir las carencias familiares buscando otros lazos en sus amistades?

Isabelle: Muchas de nuestras amigas son las del colegio y el internado de Suiza y la suerte es que tanto las de mi hermana como las mías, las compartimos. Nos ayudamos entre nosotras.

¿De niñas eran de las que se tiraban de los pelos?

Isabelle: Mi madre no nos dejaba pelearnos. Hemos tenido suerte en eso y, salvo algún berrinche que otro, la verdad es que la complicidad ha funcionado y hemos sido más amigas que hermanas.

¿A una hermana se le cuenta todo?

Victoria: Por supuesto. Una hermana nunca te va a fallar y siempre va a estar a lo largo de la vida. Compartimos muchas cosas y eso siempre queda.

¿Qué destacarían la una de la otra?

Victoria: De Isabelle me gusta su paciencia y la manera en la que empatiza con los demás.

Isabelle: Victoria siempre ha sido mi ejemplo como hermana mayor. Tiene una capacidad de trabajo impresionante.

¿Qué han heredado de sus padres?

Isabelle: De mi madre la energía y capacidad para encontrar soluciones. De mi padre destacaría lo cariñoso y bueno que es con nosotras.

Victoria: Nuestra madre es una vikinga activa que siempre nos ha puesto las pilas. Hasta a la hora de caminar nos acelera el paso. Mi padre es de una bondad increíble, hasta el punto que jamás le he escuchado hablar mal de nadie.

Pues yo siempre he visto a Phillippe Junot como un galán más que un santo.

Victoria: Es verdad que tiene esa imagen pero con nosotras es de otra manera.

Isabelle: Es pura paciencia y siempre nos pone por delante. Es mi debilidad aunque mi madre sea mi mejor amiga.

¿Y le ha cambiado la vida ahora que es marquesa de Cubas, Isabelle?

Isabelle: No sé si me ha cambiado porque, tras la luna de miel, me he metido en ‘MasterChef’. Me paso el día entero cocinando y no tengo tiempo ni para el móvil. Está siendo toda una experiencia porque de cocina sabía lo justo y hoy te puedo hacer maravillas. El tiempo libre lo paso en el restaurante Coque donde los hermanos Sandoval me enseñan de todo y no tengo palabras de agradecimiento. He aprendido a ser un ama de casa completa y me encanta y hace muy feliz.

¿Impone tener una hermana marquesa?

Victoria: No cambia nada pero es algo bonito.

Isabelle: Fue Tamara Falcó quien me explicó que ser marquesa es como si te dejan una encina milenaria que no te pertenece, pero que tienes que cuidar hasta que pase a la siguiente generación. Así se lo contó su padre a ella.

¿Qué tal se lleva con su suegra, Marta Chávarri?

Isabelle: De maravilla. Es un amor y desde el primer momento me ha hecho sentir parte de la familia.

¿Ya piensan en tener bebés?

Isabelle: Claro, pero será cuando surja. Ahora hay proyectos por delante.

Tienen suerte de no ser ‘víctimas’ de un divorcio traumático.

Isabelle: Nuestros padres siempre pusieron a sus hijos por delante, nos protegieron, y por eso nunca hemos oído en casa hablar mal el uno del otro.

Victoria: Cuando mi madre me dijo que se divorciaban no lo entendí porque tenía solo ocho años. Me lo explicó diciendo que amaba a mi padre más como un hermano que como una pareja.

Son tres hermanos pero su padre tuvo después otra hija de su siguiente relación. ¿Tienen contacto?

Victoria: Hay mucha diferencia de edad y vive en otro país; no hay tanta relación.

¿Sueñan con vivir todos juntos de nuevo?

Victoria: Siempre decimos que lo ideal sería comprar una casa enorme donde meternos todos, cada uno en una zona.