176.307 euros: la elevada deuda que Antonio David Flores se niega a pagar

Unas declaraciones que no tardaron en ser recogidas por los principales programas de televisión de la época y que supusieron un auténtico bombazo. Rocío confirmaba así que ni sabía ni quería saber nada del padre de sus nietos, en contra de lo que ha sostenido él en los últimos tiempos .

En el derecho de defensa propia, Antonio David decidió demandar a su ex suegra. Contrató los servicios del abogado Emilio Rodríguez Menéndez y en el año 2000 interpuso demanda por derecho al honor, solicitando una indeminización de 6 millones de euros. Sin embargo, sus pretensiones cayeron en saco roto y en septiembre 2002, la demanda fue rechazada de pleno, condenando al ex guardia civil al pago de las costas tasadas en 84.748 euros. A pesar del varapalo, Antonio David recurrió ante la Audiencia Provincial de Madrid que, como era de esperar, también absolvió a Rocío Jurado y condenó, en segunda instancia, al excolaborador de 'Sálvame' a hacer frente a las costas por un importe de 51.054 euros.

Siguiendo la misma línea, y tras el recuso presentado por la parte demandante, el Tribunal Supremo confirmó en 2009 la libre absolución de la demandada e impuso las costas a Antonio David de 40.775,21 euros que, desde entonces, ha evitado el pago de las cantidades.

En conversación con ABC, Marcos García Montes , abogado de Rocío Jurado en esta causa, confirma que Antonio David sigue adeudando una abultada cantidad: « Debe más de 176.000 euros más los intereses que se han generado durante todos estos años . Lo cierto es que solo hemos podido embargarle 9.000 euros porque factura a través de terceras personas y sociedades, se ha escapado como una anguila pero también es problema de las productoras que no dan los datos».

En caso de no pagar y si finalmente el prestigioso letrado así lo decide, podria interponer querella por presunto alzamiento de bienes. Un movimiento judicial que podría acabar con Antonio David entre rejas, pues de confirmarse el supuesto delito, podría enfrentarse a una pena de privación de libertad de hasta cinco años.