Soluciones de última hora para celebrar Navidad en casa sin ensuciar la cocina

Tomada la decisión de disfrutar sin agobios cualquiera de las celebraciones navideñas, quien manda es el presupuesto y las ganas de comodidad que se tengan. Restaurantes de Madrid y tiendas gourmet –algunas envían a cualquier punto de la península– ofrecen cada vez más posibilidades para no encender los fogones. Con la ayuda del un microondas se puede ser el rey de las fiestas.

Abanderados de ese tapeo castizo y la costumbre del picoteo desenfadado, Hermanos Vinagre sale estos días de su taberna actualizada. Icono del aperitivo en Madrid, con conservas y escabeches propios que elaboran en su fábrica en Boadilla del Monte, ofrecen la alternativa de vestir la mesa del 25 de diciembre y el 1 de enero con un 'delivery' de sus banderillas, sus gildas, sus boquerones en vinagre, sus torpedos –pepinillos grandes rellenos de anchoas, guindillas o arenques– o alguno de sus escabeches de mejillones o de codorniz, por ejemplo.

El marisco es el líder indiscutible de las mesas de Navidad. Sinónimo en España del ágape y del exceso festivo. Saber elegir bien dónde comprarlo es ya toda una tarea, pero cocerlo –o cocinarlo en cualquiera de sus versiones– sin destrozarlo es una empresa aún más compleja. Para Nochebuena y Nochevieja, los hermanos Martín Hevia, Ismael y Fernando, sacan de la carta de Hevia clásicos de su carta preparados para dar el último toque en casa –con instrucciones–, en servicio de recogida al mediodía en este espacio de Serrano. Gambas, centollo al 'senyoret' u ostras entre otros platos como la ensaladilla rusa, ahumados, el consomé navideño, una casi extinta sopa de arroz de merluza o los callos.

Las tiendas gourmet son un hervidero de encargos estos días. Su músculo está en el empaquetado, diseñado exprofeso para viajar muy bien hasta las casas. Martiko está especializado en productos derivados del pato y ahumados que envían a domicilio. El 'foie gras' entero, por ejemplo, el 'confit' o el 'magret' que, en el peor de los casos, solo necesita pasar unos minutos por la plancha para ensalzar todo su valor. Otras, como Petramora lanzan estos días opciones cómodas –aunque requieren un mínimo paso por cocina– como el cordero lechal de su propia dehesa, su 'roastbeef', el pato preasado o una pularda rellena de 'foie' y trufa negra (21 euros por persona) con el sello de un chef Premio Nacional de Gastronomía, Jordi Vilà.

Optar por no cocinar en casa tiene la ventaja de acceder a recetas complejas como el 'pâté en croûte', una fórmula clásica de la cocina francesa –una terrina de carnes horneada en masa quebrada– que ha regresado con fuerza a las mesas. El obrador de Mallorca, la célebre pastelería madrileña, prepara estos días su versión rubricada por el chef Mario Valles, del restaurante Hortensio. Forma parte de un 'pack' para cuatro personas que incluye ensaladilla trufada de langosta y pipas de granada; el solomillo Wellington que Mallorca elabora en Navidad desde hace décadas y un roscón de Reyes de nata pequeño –370 euros, con una botella de vino–.

Recetas icónicas que pueden encontrarse también en otro de los templos del academicismo culinario como es Lhardy. Este restaurante, con más de 180 años de historia, ofrece parte de su carta para ser disfrutada durante las fiestas –a domicilio o para recoger en la propia tienda–. Entre otros, están sus callos, los citados 'pâté en croûte' y solomillo Wellington con patatas a la inglesa; el lenguado Evaristo al 'champagne' o su historiado cocido de ingredientes nobles.

Wellington con firma está también el de Isabel Maestre en la capital. Y cocido para llevar los días de Navidad y Año Nuevo, el de Casa Carola. Cozina by Santerra, con el sello de Miguel Carretero, tiene disponible su menú navideño con tintes clásicos: seis entrantes como la bullabesa de pescados de roca, y unas perdices estofadas a la bordelesa como plato principal, además de varias guarniciones y postres –160 euros para 2 personas–. Se le pueden añadir además platos adicionales como el pato 'à la royale'.

Son el alma de muchas de las mesas festivas, con el cordero, el cochinillo y las aves como protagonistas. A tenor del coste de la electricidad y pese a que los preasados son generalmente más caros que hacerlos en casa, no son nada desdeñables. Desde Mercamadrid, la empresa cárnica Solobuey se envían en 48 horas a toda la península pavo, pollo de aldea, pularda –con foie, ciruelas y cebolla caramelizada– y piezas asadas listas para calentar de cordero, cabrito o cochinillo.

Jhosef Arias mantiene estas fechas señaladas su 'delivery' en la capital de pollos asados al carbón al estilo peruano desde su restaurante HUMO. Otros como Uskar, también en Madrid, facilitan el acceso a piezas selectas como la paletilla de cordero segureño IGP asada (35 euros para dos personas). En el Mesón de Fuencarral, otro clásico madrileño que acaba de cumplir 90 años, mandan a domicilio –o bien para recoger en el restaurante– sus emblemáticos asados de cordero y cochinillo con guarnición.

Si lo que se necesita es cubrir el menú de una de los días señalados de las Navidad hay opciones completas. En Bistronómika, Carlos del Portillo ha diseñado dos propuestas para recoger en este restaurante de la capital, dedicado al pescado y las brasas, el mismo 24 y 31 de diciembre. Ambas comparten los entrantes: sopa donostiarra, pastel de cabracho, gilda, ensaladilla con centollo y cardo con langostino. Se diferencian en el principal: rodaballo a la brasa o pichón –90 y 85 euros por persona, respectivamente, para cuatro comensales como mínimo–.

Nino Redruello, cuarta generación de La Ancha, ha creado también un menú a domicilio para dos personas (90 euros) basado en la tradición y listo para calentar, con sus instrucciones, y servir. Con entrantes como croquetas de carabinero y salpicón de marisco; primeros como la menestra de verduras con su salsa verde o una clásica sopa donostiarra; lubina confitada o jarrete de cordero con jugo de caldereta manchega como principales; y tronco de Navidad, de postre.

Incluso opciones más completas que añaden montaje y desmontaje, camareros, menaje, mantelería y cristalería. Es el caso del catering del restaurante Juanyta Me Mata! para estas fechas.

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Como cada año, el 22 de diciembre vuelve el sorteo extraordinario de Lotería de Navidad, que en esta ocasión reparte 2.500 millones de euros. Aquí puedes comprobar Lotería de Navidad, si tu décimo ha sido agraciado con alguno de los premios y con cuánto dinero. ¡Mucha suerte!