Ruta para comer por donde no pasa nadie (IV) Hostal La Viuda: Setenta años de buen comer

Ya en el pueblo, parada obligada en la pastelería Caneda, donde elaboran las mejores bicas de Trives, unos estupendos bizcochos que se hacen con manteca de vaca. Y luego a comer en el hostal La Viuda, una casa que tiene su origen en 1951, cuando Asunción López, viuda y con un hijo, abría en el pueblo el bar Rincón, donde empezó a dar de comer platos populares como callos, empanadas o albóndigas. Su cocina se hizo pronto muy popular entre viajantes y comerciales de la zona.

Para hospedarlos, Asunción, que era conocida como La Viuda, abrió un pequeño hostal que funcionó tan bien que en 1972, junto a su hijo Ángel y la mujer de este, Clara, tuvo que trasladarlo a un lugar más céntrico y espacioso dentro del pueblo. Actualmente es la tercera generación, loshermanos María y Anxo Fernández, más conocido este como Anxo Trives, la que está al frente. Ambos mantienen el trato familiar y la cocina de raíz popular elaborada con el mejor producto de la zona que han sido las bases del éxito de este hostal.

Anxo Trives es un cocinero inquieto. Graduado en el Centro de Hostelería de Galicia fue alumno del repostero Paco Torreblanca y finalmente decidió quedarse en el restaurante familiar. En La Viuda ofrece entre semana un buen menú del día compuesto, como la carta, por platos de esa cocina tradicional que ha sido santo y seña de esta casa de comidas durante más de setenta años. Al mismo tiempo, el cocinero está dando importantes pasos para brindar a sus clientes una cocina por encima de la media, actualizando recetas pero respetando la tradición de la zona.

Y siempre con la mejor materia prima, que le proporcionan productores de proximidad. Su caldo gallego de verano, que prepara con judíasverdes en lugar de berzas y que se sirve al final de la comida; sus láminas de tocino de matanza casera curado en sal y ahumado en roble; la perdiz escabechada abatida en los montes de los alrededores; los callos con garbanzos o la merluza en ajada montada con patata, perfecta de punto, son platos que justifican una visita y que acercan al comensal a la gastronomía popular de esta comarca montañosa del norte de Orense.

Pero cuando más luce el cocinero es en los fines de semana, con un menúespecial por 40 euros en el que aparecen platos más modernos que dan la talla de Anxo Trives. Menú en el que hay que elegir una entrada y un segundo entre diversas opciones y que incluye también prepostre y postre. Las opciones son tentadoras. Entre otras cosas: ajoblanco con xarda y mejillones en escabeche; fabas lobas de A Veiga con cocochas de merluza; ensalada de xarda y frutas; garbanzos a curry con gambón; canelón de pollo teriyaki; cochinillo celta de Viana; perdiz a la cazadora, o gallo de Os Chambras con castañas de Amarelante. Precisamente con estas castañas, para ponerlas en valor, lleva años trabajando Anxo. En algunos casos incorporadas a postres también de origen popular que ha sabido actualizar con la influencia recibida de Torreblanca.

En cuanto a los vinos, en La Viuda hay una completa carta de referencias gallegas, especialmente de Orense, aprovechando la privilegiada situación de esta comarca, limítrofe con la Ribeira Sacra y próxima a las denominaciones de origen Valdeorras, Monterrei y Ribero.