Le Petit, el encantador bistró de Salesas con las mejores verduras (y alcachofas)

Le Petit es el alma del publicista Pablo González del Tánago, quien en 2010, aprovechando su visión de las tendencias y su afición por la gastronomía, que le viene de cocinar con su madre y antes su abuela, decidió abrir un restaurante dedicado a la comida saludable y las ensaladas pensando en los oficinistas con pocas alternativas por aquel entonces. Lo de Petit Appetit, situado en la calle Monte Esquinza -donde también ofrece pasta y pizza italiana-, fue un éxito que lo llevó, dos años más tarde y siempre junto a su socio Juan Piñero, a abrir otro (tiempo después sumarían el tercero, el elegante Merci de la calle Conde de Xiquena) hecho a la medida de sus propios gustos y aficiones.

Así, Le Petit está decorado con antigüedades y piezas únicas que él mismo busca y adquiere en Francia y que, junto a la reforma del local para quitar revestimientos y devolver a la vista los elementos originales del antiguo edificio castizo cuyos bajos ocupa, le dan calidez, personalidad, buen gusto y mucho estilo.

Es el bistró por antonomasia: pequeño, cautivador, cercano y con una oferta de vinos y de comida basada en recetas sencillas y sabrosas de la gastronomía mediterránea, con un guiño especial en su caso a la francesa, que ponen en el centro al producto fresco de calidad. A su propietario y anfitrión -le gusta recibir a los clientes y darles la bienvenida- le obsesiona la materia prima, conseguir el mejor pescado, servir una copa excelente, presentar unas verduras irresistibles.

Lo son sus alcachofas, de las mejores que se pueden encontrar en Madrid y su plato más famoso. Son de Navarra y solo las sirven durante su temporada, tras ser confitadas en aceite de oliva virgen y cocinadas a la plancha. También triunfan sus espárragos blancos, que llevan asimismo un confitado pero a baja temperatura y en leche, o los guisantes con berberechos, las anchoas de Santoña y la ensaladilla. Como principales, sus carnes -el steak tartar, el roast beef al estilo inglés con puré, el lomo de vaca con patatas y sobre todo el rabo de toro-, sus pescados -desde tartar de salmón o tataki de atún hasta bacalao confitado, salmón a la plancha, la lubina 'a nuestra manera' o la corvina al horno- y, entre las pastas, sus risottos o su tagliatelle a la Norma con berenjena.

Con un ticket medio de 50 euros, buena acústica pese a su tamaño reducido y una atención amable y muy profesional, en el coqueto Le Petit los postres son caseros -tartas varias, queso de cabra al horno y helados-, el ambiente íntimo y relajado y los encuentros se alargan con una copa de vino español -salvo un rosado italiano- o de champagne de su selecta bodega.

Le Petit. C/Argensola, 24, Madrid. Abre de lunes a sábados de 12.30 a 2 de la mañana, los domingo hasta las 17 horas.lepetitrestaurante.com