El mejor chocolatero de España está en esta pastelería centenaria de Alcázar de San Juan (y tiene tienda en Madrid)

Este manchego ha logrado imponerse en una final nacional –celebrada el pasado 5 de marzo en Vic (Barcelona), en la sede de la Chocolate Academy organizadora del campeonato– frente dos compañeros de oficio: Arnau Triola, chef dulce en el restaurante Castell de Peralada (una estrella Michelin en Peralada,Gerona) y Arnau Fusté, de la pastelería Fusté de Malgrat de Mar (Barcelona).

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Este concurso gira cada edición en torno a una temática. La de este año ha sido el 'juego' a través de varias pruebas que el manchego ha superado con éxito. Pese a estar acostumbrado al estilo de pastelería tradicional que ha heredado de su familia, ha confesado sentirse cómodo buscando ese equilibrio entre la esencia de su casa y los gustos de su clientela –postres clásicos muy basados en la almendra, la miel, las cremas y el chocolate– con la sofisticación que exige este tipo de concursos.

Su trabajo para alcanzar esa final mundial del World Chocolate Masters ha sido un homenaje a la evolución de la pastelería La Rosa, un establecimiento que lleva desde 1917 en el la calle más popular del municipio manchego, la de Emilio Castelar, el eje comercial y peatonal que une el paseo de su histórica estación de trenes con la plaza de España del municipio.

Así, con el primero de sus postres ganadores –una caja de engranajes de chocolate con toques de vainilla, bizcocho y naranja– hizo un guiño a las antiguas máquinas de pastelería. Otra de las elaboraciones por las que el jurado creyó ser merecedor de representar a España fue un bombón –La Rosa es célebre, entre otras cosas, por sus bombones– con una base de crema. La última fue una tartaleta en cinco texturas, una por cada generación de esta casa centenaria que tiene una sucursal en Madrid –Pastelería La Rosa 1917, en la Ronda de Atocha número 3, muy cerca de la estación Puerta de Atocha - Almudena Grandes–.

El alcazareño, que ha recibido el cariño de la leal clientela que tiene en su pueblo natal, se ha mostrado asimismo sorprendido por el interés que han tenido en su trabajo compañeros consagrados de diferentes puntos de España. Su máxima en este concurso ha sido apostar por la «naturalidad» y por la «honestidad» con pequeñas licencias creativas que dan muestra del futuro que ya ha emprendido al tomar los mandos del obrador de su familia. En 2026, en esa final parisina de la Word Chocolate Masters, tendrá que luchar contra 18 de los mejores maestros pasteleros y chocolateros del mundo.