7 consejos infalibles para que tu bebé coma variado

Para entender mejor porque unos alimentos cuestan más que otros, Elena Toledano, nutricionista de Roots Mindfoodness, explica que «el rechazo a los alimentos sólidos es un comportamiento habitual y totalmente normal, de hecho, es un comportamiento innato: de pequeños evitamos inconscientemente comer alimentos nuevos que pudieran suponer un riesgo para nosotros por ser venenosos, lo cual es frecuente entre los alimentos de origen vegetal por ser ciertamente amargos. Este amargor, típico de venenos y tóxicos, nos hace rechazarlos sin razón y preferir los sabores dulces: por eso suelen rechazar las verduras y en cambio mueren por un trozo de pan ».

Es necesario comprender la complejidad de los múltiples factores que rodean la alimentación y cómo estos influyen en las preferencias alimentarias de los niños. Según apuntan desde la marca hay que tener en cuenta que durante la infancia los niños están constantemente expuestos a nuevos sabores, olores, texturas… Ante toda esta oferta, es normal que muchos alimentos les resulten extraños o poco apetecibles. Por ello, desde Roots Mindfoodness facilitan unos tips para conseguir que coman mejor:

- Hacer que la hora de comer y el ambiente sean agradables : es importante generar un entorno cómodo para que el bebé se sienta bien y esté abierto al descubrimiento de nuevos sabores.

-Dejar que sea él quien gestione la comida con las manos, ¡adiós al avioncito!: dejemos que experimente él mismo con la comida que se familiarice y que experimente nuevas texturas.

-Predicar con el ejemplo: en la medida de lo posible que vean que el resto de la familia come lo mismo que él o ella que se sienta parte de ese momento familiar comiendo.

-Exponer al niño a una variedad de alimentos saludables

-No desistir, con paciencia y repetición lo comerán poco a poco: es clave que el más pequeño no nos vea desesperar porque podemos contagiarle los nervios y que no quiera comer más. No importa el tiempo que estemos comiendo mientras el bebé vaya comiendo los alimentos.

-No forzar al niño a comer ningún alimento: si existe un rechazo claro a un alimento, no forcemos, probemos a cocinarlo con otra receta o combinado con otros ingredientes para comprobar si tiene mejor aceptación.

-No usar los alimentos que les gusten como recompensa ni verduras como castigo: no utilizar los alimentos como premio o castigo porque los convertimos automáticamente en alimentos buenos y malos.

Desde Roots Mindfoodness recomiendan presentar la comida entera ya que puede ayudar a que el bebé coma mejor y si es posible, practicar el BLW ( Baby Led Weaning ), sin recurrir a los triturados. De esta manera, el bebé podrá identificar desde un principio los alimentos que va a comer: ve cada ingrediente por separado y no un puré sin más.

En esta línea la marca ofrece dos líneas de producto para las distintas etapas desde los 6 meses a los 2 años, PAPIS y ALPHYS, en que las verduras vienen en su formato entero, por lo que se promueve que el bebé se relacione de forma saludable a nivel organoléptico con el alimento. De esta forma, el bebé acabará por aceptarlo mejor que con alimentos triturados o potitos comunes.