El gran chasco de una mujer a la que impiden subir al tren por ir con sus cuatro hijos pequeños

Llegó el día y la hora de partir la pasada semana. Ana, como madre, se mostraba también ilusionada por vivir esta experiencia con sus hijos. Llegaron con bastante tiempo de antelación a la estación de Chamartín de Madrid. Ya en al andén, Ana se dispuso a sacar del bolso los billetes que había comprado por internet en Ouigo España para dárselos a la interventora, quien se quedó un rato observando los billetes. En ese momento, le preguntó a Ana: «¿Va usted sola con los 4 niños?». «¿Viaja usted sin su marido?». Ana, extrañada por estas preguntas, afirmó rotunda que sí, que viajaba sola con sus hijos y que su marido se reuniría un día después con ellos. «Pues, lo siento, pero sola con los 4 niños no puede subir al tren. Solo admitimos dos niños y un bebé acompañados por un adulto. Si son más niños debe ir otro adulto más. Es política de la empresa».

En ese momento, esta madre no podía dar crédito ante la negativa de poder subir al tren con sus hijos. En el intercambio de pareceres entre esta madre y la interventora, los niños comenzaron a llorar desconsoladamente. «No daba crédito a la situación. No tuve más remedio que dejar marcharse al tren. Mis hijos me preguntaban por qué no nos íbamos a ver a los abuelos. Yo, la verdad no sabía cómo darles una explicación, no podía decirles que no dejaban que subieran al tren».

Esta madre confiesa a ABC su gran indignación ante este tipo de medidas. «Me dijeron que era política de empresa por seguridad. ¿Pero es que yo no sé cuidar de mis hijos? ¿Es que yo no me encargo diariamente de los cuatro? ¿Es que yo no viajo en autobús urbano que es aún más peligroso porque, además, voy de pie con los cuatro niños? Me parece una política muy discriminatoria para las madres con más de tres hijos. Es muy injusto».

Asegura que ha puesto una reclamación. «Es la primera que pongo en mi vida. No busco que me devuelvan el dinero de los billetes, solo que no pongan trabas a las familias numerosas y que no le vuelva a pasar algo así a otras familias. Aspiro a una sociedad más justa que que atienda a nuestras necesidades».

Reconoce que toda situación es una enseñanza. «Es verdad que en la aplicación no me dejaba comprar más de tres billetes infantiles, pero pensaba que era porque como siempre tienen muchas ofertas, ésta era una más. Por eso a mi cuarto hijo se lo compré de adulto para poder obtener los billetes. Tras el incidente en la estación de tren y regresar a casa me percaté de que, en la letra pequeña, aseguran que un adulto no puede viajar con más de dos menores y un bebé».

ABC ha contactado con Ouigo España para conocer su postura ante este suceso. «Efectivamente, es nuestra política de empresa establecida por motivos de seguridad, ya que las condiciones son cada vez más exigentes. En ningún momento contemplamos que esta madre no pueda ocuparse de sus hijos, pero ante un accidente o incidente, la situación es difícil de gestionar y si les ocurre algo a los pequeños, la responsabilidad también es nuestra. Es más, se supone que ella -aseguran- al comprar los billetes ha aceptado nuestras condiciones. Lo que mucha gente llama letra pequeña, está ahí y es legal en nuestro país. Esta decisión -matizan estas mismas fuentes a ABC- es fruto de la experiencia de muchos años del grupo Ouigo España, y en ningún momento trata de discriminar a ninguna familia por su condición de ser numerosa. Sabiendo que son nuestras condiciones, cada usuario es libre de elegir o no otra opción. Así es el mercado».

Desde la Federación Española de Familias Numerosas declaran a ABC que «resulta inaceptable que una madre o un padre no pueda viajar con más de 2 hijos en un tren y que la compañía alegue que es política de empresa por razones de seguridad, presuponiendo que no podrá hacerse cargo de todos ellos adecuadamente. Este tipo de situaciones demuestran la poca sensibilidad que hay en determinados sectores y empresas hacia las familias y los niños, y el poco valor y reconocimiento que se le da a los que tenemos hijos. Con la baja natalidad 'histórica' que estamos viviendo y lo que esto supone, en lugar de facilitar las cosas y ayudar a esta madre o padre que va solo con sus hijos a la hora de viajar, que sería lo lógico, se le pone trabas hasta el punto de impedirle el viaje».

Añaden que entienden que se establezcan limitaciones o condiciones especiales en función de la edad de los niños, por ejemplo en lo que respecta a los bebés y la forma en que viajan, «pero es un abuso limitar el viaje a dos niños por adulto y creemos que estas políticas en cualquier medio de transporte deben desaparecer y darse la vuelta totalmente, en el sentido de apoyar y facilitar el viaje con niños, cubriendo las necesidades (asistencia, espacio, etc.) que pueda haber en ciertos casos como, de hecho, hacen algunas compañías».