«Para controlar sus cuentas, las familias deben considerar siempre los imprevistos, el “y si...”»

Pilar Úcar y Yolanda Fernández, autoras de 'Lengua y economía en el aula y la calle', aseguran que el endeudamiento en el que caen muchas familias «es por haber comprado más de lo que podían pagar, tanto en el presente como en un futuro»

«Estamos en un momento de cambios económicos importantes. No cabe duda», aseguran Pilar Úcar y Yolanda Fernández , autoras de 'Lengua y economía en el aula y la calle' . Matizan que ahora mismo todo el contexto económico internacional está en un momento ... aún más convulso como consecuencia de la invasión de Putin en Ucrania.

Añaden que nos estamos acostumbrando a escuchar mensajes del tipo “la inflación se va a disparar por la falta de abastecimientos de fuentes energéticas y materias primas”, “el sector ganadero entrará en crisis”, “se prevé una reducción del PIB”... «Esto crea un clima de incertidumbre y miedo sobre el futuro económico del país que puede ser insostenible; sin embargo, la posible crisis en los países occidentales podría amortiguarse si los ciudadanos conocieran mejor lo que hay detrás de todo esto —puntualiza Pilar Úcar—. Si se supiera que sobre la variación de precios influyen tres factores y que los propios ciudadanos españoles podemos agravar con nuestro comportamiento, es posible, que los mercados se calmaran y se pudieran reducir los efectos finales sobre nuestras economías occidentales.

¿Resulta a veces complicado manejarnos porque se desconocen determinados conceptos económicos? ¿Los usamos de forma incorrecta y eso afecta a nuestras cuentas

Aunque se utilizan muchos términos económicos de forma coloquial, en muchos casos se hace de manera inadecuada, por ejemplo, se suele confundir frecuentemente “deuda Pública” con “déficit público” lo que genera una importante confusión sobre el papel que tiene el sector público en una economía. De ahí la importancia del lenguaje económico en el aula, su aprendizaje y su práctica.

Lo mismo ocurre cuando se habla de las empresas ¿cuántas veces se distingue entre los distintos tipos de empresas? Es necesario que se sepa que no todas son iguales ni se enfrentan a los mismos problemas o necesidades. No conocer lo que realmente representan los términos económicos más habituales sugieren ideas preconcebidas que, lamentablemente, luego provocan comportamientos inadecuados a todos los niveles, incluso el económico.

Por ejemplo, la falta de abastecimiento de aceite de girasol desde Ucrania ha supuesto un comportamiento en los consumidores de este producto de intentar comprar lo antes posible este producto para no quedarse sin él; consecuencia, si hay menos oferta en un mercado y la demanda del producto aumenta, el precio del aceite de girasol aumenta de forma inmediata. El comportamiento de consumidor ha contribuido a que el precio subiera más de lo que debía ¿se ha preguntado algún consumidor si existía la posibilidad de sustituir ese tipo de aceite por otro o si se podría traer de otro país para garantizar la oferta? Posiblemente no, simplemente porque desconocía esas posibilidades.

El miedo a las matemáticas por parte de una parte de la sociedad, ¿también influye en unas malas cuentas en algunos hogares?

Las matemáticas se utilizan de forma general en todas las Ciencias y en Economía, en particular, pero no son lo fundamental, son una forma más de expresar ciertas relaciones entre las variables que se desean estudiar en esta ciencia.

Todas las personas realizamos transacciones económicas constantemente y no utilizamos matemáticas, de hecho, la Economía es una Ciencia Social claramente ligada a lo que ocurre en una sociedad constantemente como consecuencia del comportamiento de las personas que la componen. El problema es que no tenemos conciencia de ello.

En este libro se plantean ejemplos prácticos y actividades desde el punto de vista lingüístico para evitar errores que se oyen en la calle y se leen y ven en los medios de comunicación.

¿Cuál sería la hoja de ruta para estar más formados de forma práctica y rápida?

Ser conscientes de que todos somos participes activos de lo que ocurre en la economía de cualquier país y conocer, con cierto detalle, los matices que tienen los principales términos económicos que se utilizan. Para esto es necesario acercar los conceptos expresados con un lenguaje económico técnico a palabras que todos puedan entender.

Además, siempre es importante intentar acudir a las fuentes oficiales que nos aportan la información que necesitamos para profundizar en aquellas cuestiones que más nos preocupan, porque la tendencia a cuantificar las cosas no es única y el mismo concepto (por ejemplo, variación de la renta de una nación) puede dar lugar a muchas matizaciones que crean confusión entre los ciudadanos.

Defendemos el correcto conocimiento de cada registro idiomático, así como la intencionalidad del acto comunicativo y el contexto en que se produce; conviene marcar límites y precisar el significado para no llevarse a engaños.

¿Saben las familias hacer sus compras de manera adecuada?

No es cuestión de que sean o no adecuadas, sino de que se pueden producir compras que no se correspondan con las condiciones reales a las que se enfrenta la familia. Es lógico que todos queramos satisfacer nuestras necesidades, pero ¿qué se considera necesidad? Muchas personas se endeudan para conseguir cosas que ni son del todo necesarias. La tendencia a un excesivo consumismo y con visiones a corto plazo provoca que el comportamiento de las familias no sea, en muchos casos, el más adecuado. Hace falta pensamiento reflexivo sobre este asunto.

¿Influyen las nuevas formas de pago en un menor ahorro?

El tema no es tanto pagar con tarjetas o con móvil u operar en criptomonedas, sino que lo importante es que el consumidor sea consciente de los límites de renta que tiene. Estos medios facilitan las transacciones pero, que se hagan más o menos de las que se puede dada una limitación de fondos, es responsabilidad del propio consumidor.

Las situaciones de endeudamiento en el que caen muchas familias es por haber comprado más de lo que podían pagar tanto en el presente como en un futuro. Estos consumidores son los que luego tienen más problemas.

¿Cuáles son vuestras recomendaciones básicas para generar más ahorro?

La sensatez que debe tener todo el mundo en no intentar superar los gastos que se puede permitir teniendo en cuenta la renta que posee y, si lo supera, que lo haga de forma puntual y planificando cómo va a pagar la deuda que ha asumido.

El comportamiento económico debería ser menos impulsivo y tener en cuenta que en momentos de inestabilidad se pueden presentar muchos imprevistos que siempre hay que considerar. Como se ha dicho en muchas ocasiones tener presente el “y si se produce…”

Y siempre desde el lado de la comunicación y de la comprensión; si la economía forma parte de nuestras vidas y es algo ineludible concedamos la importancia que tiene el conocerla a través del lenguaje exacto.

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