Hazte premium Hazte premium

DIÁLOGOS DE FAMILIA

Laura Baena, de Malasmadres: «Las 40 horas semanales no son compatibles con la maternidad si no hay flexibilidad»

'Yo no renuncio' es el libro de la malamadre jefa en el que cuenta su historia de renuncia profesional

Laura Baena FOTO: GUILLERMO NAVARRO / VÍDEO: IGNACIO MOREIRA, RAMSÉS MARTÍN, ABC MULTIMEDIA
Ana I. Mart�nez

Esta funcionalidad es sólo para registrados

Ocho años han tenido que pasar para que Laura Baena , fundadora del Club Malasmadres y presidenta de la Asociación Yo No Renuncio , se haya decidido a contar en primera persona su historia de renuncia profesional tras ser madre . Muchos ya la conocen, pues esta creativa publicitaria comenzó a desahogarse en Twitter allá por 2014 cuando experimentó en primera persona que el desarrollo profesional de la mujer se ve frenado por la maternidad, que ellas no pueden con todo y que la crianza se aleja mucho de la versión romántica que tradicionalmente nos han vendido. Así fue cómo nació el Club que ya aglutina a más de un millón de seguidores.

En 'Yo no renuncio' (Lunwerg), Baena habla en primera persona de la lucha diaria de cientos de miles de mujeres por la conciliación. Experiencias, emociones, reflexiones e ideas se cruzan en estas páginas de auténtica catarsis con información de estudios y datos rigurosos sobre la maternidad y la conciliación, campañas y peticiones y muchas entrevistas, historias, anécdotas y aprendizajes de otras mujeres que la autora desea que sirvan para ayudar a otras tantas en el mismo camino.

Porque este libro está incompleto. Toda 'malamadre' que lo lea debe poner el broche final con su propia historia personal de renuncia , de no conciliación, en las últimas páginas amarillas que Baena ha dejado sin escribir. «Con el libro pretendo romper con el silencio que impera a través de mi historia personal, de cómo viví mi renuncia, para que muchas mujeres den el paso y cuenten su historia. Creo que así podremos generar movimiento y el cambio social que necesitamos», cuenta a ABC.

¿Conciliar es reducirse la jornada y perder salario?

No. Conciliar no es reducirse la jornada, coger una excedencia o frenar tu carrera profesional. Conciliar de verdad es no tener que renunciar a ver crecer a nuestros hijos e hijas ni a nuestra carrera profesional. Parece que cuando te pones la 'M' de madre tienes que renunciar. Incluso parece una elección libre, es decir, que tú eliges frenar tu trayectoria profesional y coger una reducción de jornada. Pero no es así porque ¿qué pasaría si tuvieras flexibilidad horaria? ¿También lo harías?¿O si hubiera verdaderas redes formales de cuidado o estructuras de apoyo? ¿O si el sistema laboral permitiera apoyar la maternidad y paternidad de otra manera, lo harías? Seguro que no. Estamos en un sistema productivo poco efectivo, de presencialismos, que no ayuda nada a la conciliación. Y ojo, porque la conciliación no es solo para las madres sino para todas las personas.

Por tanto, la conciliación en España ¿existe?

Lo que estamos haciendo no es conciliar. Y se ha visto en estos dos años de pandemia, cuando todo ha saltado por los aires porque la conciliación en España son las abuelas , y lo digo en femenino y plural, y las escuelas . Se ha demostrado que no hay estructuras de apoyo a la familia. Ahora mismo hay ciertas medidas que impactan en la conciliación, como el teletrabajo que han adoptado algunas empresas, la equiparación de los permisos igualitarios de maternidad y paternidad, etc. Pero son parches. Lo que la conciliación busca, y por lo que nosotras llevamos luchando siete años, es un plan nacional que ponga las medidas mínimas que impacten en todos los agentes sociales, empresas, educación, sociedad e instituciones. Todo eso debe ir en el mismo camino. La crianza dura muchos años y no puede ser que las mujeres seamos empujadas a renunciar y a volver a casa: 1 de cada 4 ha renunciado en parte o a todo su trabajo para poder cuidar en los últimos dos años.

«Conciliar de verdad es no tener que renunciar a ver crecer a nuestros hijos e hijas ni a nuestra carrera profesional»

¿De qué medidas hablamos?

Para mí es clave la flexibilidad laboral . El trabajar por objetivos, es decir, entender el trabajo de otra manera. Las redes formales de cuidado al servicio de las familias para que una mujer pueda ir a una entrevista de trabajo y dejar con alguien a su hijo o hija, tiene que favorecerse la contratación de cuidadores que se pedía durante la pandemia, bolsas de horas corresponsables, planes de reincorporación laboral.... Necesitamos más presupuesto a nivel gubernamental para llegar a esas medidas. Estamos trabajando en un borrador que de verdad marque muy bien el camino a seguir tras reunirnos con Isabel Rodríguez, ministra de Política Territorial, en una subcomisión de conciliación.

Dices en el libro que «nos tenemos que quitar la venda para para dejar de pensar que no hemos renunciado, que hemos elegido porque no se elige lo que lo que la sociedad te impone».

Tenemos un problema, sobre todo nuestra generación, que somos la generación puente. Antes, la mayoría de mujeres renunciaba y realmente no tenía otra opción. Ahora, nosotras hemos querido estudiar, tener una trayectoria profesional y ser madres pero nos encontramos con el gran techo de cristal de la mujer: la maternidad . Es cuando se destapan los roles tradicionales, cuando se ve la brecha salarial ... Se nos ha invitado a competir con los hombres en igualdad de oportunidades y derechos pero se nos ha olvidado quién cuida de los hijos y de las hijas. Es decir, en este sistema laboral frenético, ¿dónde está el tiempo para cuidar? Una madre llega a casa, agotada de todo el día, para hacer la otra jornada que no se ve, la invisible, con su carga mental. Eso no es tiempo de calidad. O cambiamos el sistema o seguimos abocados a una sociedad sin futuro , sin reemplazo poblacional, donde los niños y las niñas no están en el centro y con una tasa de fecundidad del 1,2 hijos por mujer. ¡Es poquísimo y parece que no importa! Con el libro pretendo romper con el silencio que impera a través de mi historia personal, de cómo viví mi renuncia, para que muchas mujeres den el paso y cuenten su historia. Creo que así podremos generar movimiento y ese cambio social.

En el libro escribes: «Esto no es una empresa para mamis y bebés. Y cuando te quedes embarazada, te haré sentir mal porque ya no valdrás lo mismo y aquí ni tendrás lugar». ¿Te lo dijeron?

No te lo dicen pero es lo que sientes. Tantas mujeres sufren 'mobbing' maternal al regresar de su baja, son invitadas a irse, encuentran su carta de despido, le quitan funciones o le invitan a cambiar de puesto... Te dicen: 'ahora que eres madre ya no vales igual'. Te ponen la M de madre y te apartan. ¡Lo vemos a diario en el teléfono amarillo de la conciliación! Hemos asesorado a 10.000 mujeres sobre sus derechos de conciliación.

«Se nos ha invitado a competir con los hombres en igualdad de oportunidades y derechos pero se nos ha olvidado quién cuida de los hijos y de las hijas».

¿Deja una mujer de valer profesionalmente tras haber sido madre?

Evidentemente no. ¡Valemos más! La maternidad es un aprendizaje continuo pero es un trabajo que no se valora ni se reconoce social ni económicamente en España. Y hay que dar el paso a que sí sea reconocido porque estamos dando bienestar social, que no se reconoce, se invisibiliza y se penaliza. Es tan surrealista que la maternidad te penalice y te castigue en el sistema laboral y la sociedad general.... Por eso, ese sentimiento que tenemos todas callados hay que despertarlo. Valemos más siendo madres y la sociedad tiene que acompañarnos y permitirnos poder estar bien porque lo que estamos viendo es que se está costeando con nuestra salud mental y nuestros sueldos la falta de conciliación.

¿Cuál es el papel de los hombres?

Las mujeres tenemos que hacer equipo con ellos. Hay que sentarse, hablar y buscar el reparto equitativo tanto físico como emocional . En nuestros estudios, vemos cómo a las mujeres les cuesta mucho delegar y a ellos les cuesta tomar las riendas de las tareas doméstico familiares , es decir, de las tareas invisibles. ¡Solo un 8% de los padres están en los grupos de WhatsApp del cole! ¡No puede ser! Sí es verdad que han dado pasos, pero lo más invisible y la carga mental la seguimos llevando nosotras. Es una responsabilidad de los dos. Hay que educar a los niños en igualdad y corresponsabilidad.

¿Son las 40 horas laborables compatibles con la maternidad?

Sin flexibilidad no. Y además porque no es real, son más horas. Y en ese tiempo no estamos contabilizando la otra jornada, la de casa, la del trabajo que no se ve. Sin embargo, en la realidad sí porque son las mujeres quienes se reducen la jornada . Es algo que las administraciones públicas no ven o a las empresas les da igual. Pero es que somos responsables de que eso cambie. Este modelo laboral no es sostenible y ya se está reflexionando sobre ello: se habla de la jornada de 4 días , de pasar a trabajar 35 horas semanales... Pero si no se reconoce la maternidad, si no se apoya a la familia, esos cambios tampoco van a llegar.

De esta realidad son conscientes las jóvenes que no son madres. ¿Cuáles son sus preocupaciones?

Existe una creencia limitante: ya saben que su vida laboral cambiará cuando sean madres. No pensar en eso para que no te limite es otra opción pero la realidad es la que es. Y es muy triste y duro porque están renunciando a ser madres porque saben que la conciliación no existe y porque saben que la maternidad va a afectar a su trayectoria profesional. En nuestro estudio ' Las invisibles ' supimos que 7 de cada 10 tendría más hijos e hijas sin tuviera más medidas de conciliación . Por tanto, lo estamos diciendo ya: si el sistema cambia, tendremos reemplazo generacional. Pero ¿realmente nos importa? A veces pienso que al Gobierno le da igual. Y al Teléfono Amarillo de la Conciliación nos siguen llegando muchos testimonios de mujeres que tienen miedo de informar a su empresa de que están embarazadas. Hay miedo a las consecuencias laborales por ser madre. Es increíble.

Hablas también en el libro de la culpa, que tanto acompaña a las madres. ¿Cuántas veces has pedido perdón a tus hijas y luego te has dado cuenta de que no lo tenias que haber hecho?

Sí, nos vamos justificando y pidiendo perdón a los hijos, a la sociedad... Te sientes tan mal... Y en el libro cuento la reflexión que hice cuando en los primeros años del Club de Malasmadres empiezo a no estar en algunos momentos: mi hija mayor me reclamaba y te cae la culpa como una losa que te aplasta. Te sientes mal y te justificas y le explicas que es por trabajo, como si tú no quisieras. Pero, ¿qué imagen damos si siempre nos justificamos? Me hacía no disfrutar de mi trabajo ni estaba bien conmigo misma. Tenemos que liberarnos, priorizarnos, querernos y cuidarnos más. Vamos a ser también en esto una generación puente.

Laura, hoy alguna mujer estará pidiendo una reducción de jornada porque ve que no puede conciliar; hoy una mamá volverá a su trabajo tras las 16 semanas de baja de maternidad y no lo estará pasando nada bien; otras mujeres, hoy, estarán renunciando porque para la empresa hace ya tiempo que ha dejado de ser profesional. ¿Qué les quieres decir?

No estáis solas. Somos muchas las que pasamos por esa renuncia. 6 de cada 10 mujeres renunciamos a nuestra carrera profesional al ser madres . Vamos a seguir luchando juntas, hay que romper el silencio y generar el movimiento de 'Yo no renuncio' y apostar por esta asociación. Y vamos a conseguirlo. A esa mujer hoy ha renunciado le digo también que respire profundo porque ha hecho algo maravilloso: ser madre, dar vida Pero también animo a hablar más con los jefes y solicitarles flexibilidad porque seguirá siendo la misma profesional. Otra alternativa es emprender para darnos cuenta de que era un lugar en el que no queríamos estar.

Nosotros queremos crear una bolsa de empleo con trabajos corresponsables de empresas comprometidas y espero que sea una realidad algún día que ayude a muchas mujeres. Visibilizar y romper el silencio para que esa renuncia no sea la única solución.

Esta funcionalidad es sólo para suscriptores

Suscribete
Comentarios
0
Comparte esta noticia por correo electrónico

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Reporta un error en esta noticia

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Muchas gracias por tu participación