De cómo y cuánto «ayuda» el gesto de Cristina Lasvignes

Pero este acto que generó muchos comentarios en la redes sociales y a muchos resultó sorprendente, no es tan inusual. Por el contrario, comienza a ser cada vez más frecuente. Medios de tanta repercusión internacional como la revista americana «Times» ya dedicaron en 2012 una portada a este asunto. En ella aparecía una joven dando el pecho a su hijo de tres años, con el título «¿Eres suficientemente mamá?», lo cual también generó una gran polémica en Estados Unidos.

Existen más ejemplos, como el reciente posado de la modelo Nicole Trunfio dando el pecho a su bebé en en mayo de este añop ara la portada de la edición australiana de «Elle». También la modelo Doutzen Kroes, una de las caras más famosas de la firma Victoria’Secret, es conocida por su defensa de la lactancia materna, publicando en Instagram habitualmente imágenes amamantando a su hijo.

A ellas ya les precedieron modelos tan cotizadas como la brasileña Giselle Bündchen que en 2013 subió a su cuenta Instagram una imagen dando el pecho a su hija de un año mientras, tras 15 horas de vuelo y antes de una sesión fotográfica la peinaban, maquillaban y hacían la manicura, como una forma de reivindicar el trabajo de las mujeres.

Esta tendencia, más extendida de los que parece, no sólo se da entre modelos. Mujeres de otros ámbitos, como la empresaria vasca Nagore Aranburu compartió en las redes sociales una foto donde aparece dando de mamar a su hija Emma. Y la eurodiputada danesa Hanne Dahl acudió al Parlamento Europeo con su hija recién nacida en marzo de 2009. Durante la sesión dió el pecho a su niña.

La cuestión que muchos se plantean es si con este tipo de iniciativas se favorece o no la promoción de la lactancia materna, o más que nada se genera una polémica efímera que explota y acaba en las redes sociales entre quienes son partidarios de esta opciones y quienes eligen libremente alimentar a sus bebés con leche de fórmula.

«La aparición de personajes públicos en los medios de comunicación amamantando a sus hijos es una realidad que sale con relativa frecuencia y contribuye positivamente a promocionar la lactancia materna, lo que ayuda a aceptar esta práctica de forma natural», considera Marta Díaz, coordinadora del Comité de Lactancia Materna de la Asociación Española de Pediatría (AEP) y profesora de la Universidad de La Laguna (Santa Cruz de Tenerife).

Mas en un país como España que se encuentra muy lejos de alcanzar el objetivo recomendado por la Organización Mundial de la Salud (OMS). Este organismo internacional propone que, al menos, el 50% de los niños llegue a los 6 meses con lactancia exclusivamente materna, momento a partir del cual se puede ir introduciendo otros alimentos. «Y no estamos en ese punto . Sólo un 30% de los niños españoles sigue una alimentación exclusiva de leche materna durante sus primeros seis meses de vida», asegura Díaz.

Pero esto no ha sido siempre así. Fue a partir de la década de los 50 y 60 cuando las madres españolas comenzaron a dejar de dar el pecho a sus hijos a causa de diversos factores: la incorporación de la mujer a la vida laboral freno esta práctica junto al desarrollo de fórmulas de farmacia que, incluso, en su momento se consideraron más nutritivas. «Y ahora nuestra sociedad no está habituada a ver niños más mayorcitos, por ejemplo a partir de que empiezan a andar, lactando. Eso provoca comentarios negativos», sostiene Díaz.

Porque a estas alturas del siglo XXI, todavía existen contradicciones y prejuicios inexplicables respeto a la mujer, como apunta Cristina Martínez, presidenta de la Federación de Asociaciones de Matronas de España. «Podemos ver a una mujer desnuda y cuando una madre da el pecho nos sorprendemos», afirma. «Cada vez hay más mujeres que no tienen reparo en enseñar el pecho en público para dar de mamar a su hijo —sostiene—, pero aún así todavía hay madres que sienten pudor por lo que puedan pensar los demás. Por eso, que personalidades públicas muestren en los medios cómo amamantan a sus hijos contribuye a normalizar esta situación».

Todo con más naturalidad y normalidad, en opinión del pediatra Carlos González, autor de libros como «Un regalo para toda la vida» y «Bésame mucho», y presidente de Asociación Catalana Pro Lactancia Materna. «No creo que sean necesarias más apariciones de personajes públicos dando el pecho a sus hijos. Eso es lo normal. En muchísimos empleos la madre debería poder llevar a su hijo y no ver algo raro que la taquillera del cine, la empleada del banco o de Hacienda, nos atendiese con un bebé en brazos. Yo creo que la mayoría de las madres dan el pecho desinteresadamente, y no necesitan ninguna justificación, sencillamente es su hijo y es su derecho».

Pero para llegar a ese objetivo, hay que facilitar la lactancia materna en el mundo laboral, como recomienda la OMS y muchos expertos, ya que gran parte de las madres al incorporarse al trabajo después de la baja maternal abandonan la lactancia materna parcial o totalmente porque no tienen tiempo suficiente o no disponen de instalaciones adecuadas para dar el pecho o extraerse y recoger la leche. Las madres necesitan tener en su trabajo o cerca de él un lugar seguro, limpio y privado para poder seguir amamantando a sus hijos. Se puede facilitar la lactancia materna adaptando las condiciones de trabajo, por ejemplo mediante la baja por maternidad remunerada, el trabajo a tiempo parcial, las guarderías en el lugar de trabajo, las instalaciones donde amamantar o extraerse y recoger la leche, y las pausas para dar el pecho.

«Debe haber facilidades laborales para que una mujer sea profesional en su trabajo, madre y pueda dar el pecho a su hijo. A esas mujeres hay que ayudarles y a las que decidan alimentarlos con leche de fórmula también, respetándolas y valorándolas», concluye la presidenta de las matronas.

Según la Organización Mundial de la Salud (OMS) estos son algunos de los beneficios que tiene la lactancia materna:

—Para la salud del lactante: Los anticuerpos de la leche materna ayudan a proteger a los lactantes de enfermedades frecuentes de la infancia como la diarrea y la neumonía.

—Para la madre: Reduce el riesgo de cáncer de mama y de ovario en el futuro, ayuda a las mujeres a recuperar más rápidamente su peso anterior al embarazo y reduce las tasas de obesidad. Las madres que han dado leche tienen menos incidencia de diabetes y enfermedades cardiovasculares.

—A largo plazo para los niños: Además de los beneficios inmediatos para los niños, la lactancia materna propicia una buena salud durante toda la vida. Los adolescentes y adultos que fueron amamantados de niños tienen menos tendencia a sufrir sobrepeso u obesidad. Son también menos propensos a sufrir diabetes de tipo 2 y obtienen mejores resultados en las pruebas de inteligencia.