Perder dientes tras el embarazo: ¿mito o realidad?

A su juicio, principalmente esto ocurría «porque estos problemas no estaban diagnosticados ni tratados previamente por falta quizá de información y de concienciación en material de prevención bucodental». En la actualidad, asegura Escorial, «la evolución integral en los cuidados de la embarazada, junto con una mayor concienciación sobre la importancia de la salud oral y su cuidado han desterrado la idea de “perder dientes por tener hijos” ».

Hace tiempo que se sabe, prosigue esta odontóloga, que la relación entre la salud de la boca y la salud general es bidireccional. Por tanto, aclara, «el embarazo puede tener repercusiones sobre la salud oral del mismo modo que problemas de salud bucal pueden originar problemas durante el embarazo». Lo mejor que puede hacer una mujer, si planea quedarse embarazada, sugiere esta experta, «es mantener una salud oral buena antes de que ocurra la concepción. La visita regular al dentista junto con una higiene bucal completa (es decir, que incluya además del cepillado convencional, la limpieza de espacios interdentales y de la lengua) al menos dos veces al día, ayudarán a la mujer a vivir un embarazo sin grandes repercusiones en su boca durante todo el embarazo».

Porque tal y como explica esta doctora, «en este período se produce un aumento de los niveles hormonales que puede afectar a la salud bucodental como la generación de placa dental y como consecuencia de ello las encías pueden experimentar inflamación y sangrado, que se conoce como gingivitis». En aquellos casos, añade, «donde de manera previa existen problemas de encías no diagnosticados, no tratados o no estabilizados, el problema puede agravarse y sufrir periodontitis. La periodontitis en sus estadios más avanzados condiciona la pérdida de dientes . Como hemos indicado con anterioridad, el mejor tratamiento es la prevención».

De esta forma, sugiere Escorial, «con independencia de revisar nuestra boca de manera previa al embarazo, durante el mismo es recomendable seguir acudiendo al dentista. Este profesional revisará e indicará pautas de cuidado personalizadas y pautará la conveniencia de realizar higienes dentales profesionales, así como la aplicación tópica de fluoruros de alta concentración».

Si la embarazada presenta algún problema bucodental durante el embarazo, ¿puede ser tratada? Depende. Para esta odontóloga, «las repercusiones de no tratar afecciones bucodentales pueden ser más negativas que el riesgo que conlleva ser tratadas. Se evitarán procedimientos que no sean urgentes, pero el tratamiento periodontal o aquellos sobre dientes destinados a tratar el dolor o a evitar una infección son seguros. El trimestre ideal para hacerlo es el segundo y en relación a analgésicos y antibióticos se indicarán aquellos con mayor seguridad para el feto. Del mismo modo, la anestesia dental». Del mismo modo que la realización de radiografías se evitará especialmente durante el primer trimestre «y en el caso de tener que realizarse, se realizarán con las medidas de protección adecuadas y con una justificación objetiva».

La realidad, asegura, «es que es realmente complicado que un diente se fracture durante el parto. Generalmente si esto ocurre es porque hay cierta predisposición. Un diente previamente fisurado podrían ser condición previa para la misma». Lo más importante, concluye Escorial, «es que durante el embarazo es importante llevar una dieta variada y saludable, donde el aporte de nutrientes y elementos esenciales esté asegurado tanto para la madre como para el feto. Es fundamental seguir las recomendaciones sobre el aporte de calcio y vitamina D durante el embarazo ».