Adolescentes que aprenden a alimentarse correctamente

Este programa se puede seguir de manera online totalmente gratuito y está formado por diferentes actividades que se llevan a cabo tanto en el aula como fuera de ella.

El programa, que ya cuenta con más de 30.000 beneficiarios directos e indirectos, contó con una primera fase de intervención sobre el terreno con la que se pretendía evaluar los cambios que experimentaban los hábitos de alimentación y de actividad física de jóvenes entre 13 y 14 año s de toda España. Esta iniciativa ha realizado intervenciones en 79 centros con la puesta en práctica de una metodología educativa y la evaluación posterior del impacto de ésta sobre los hábitos de los estudiantes.

El Instituto ganador en la última edición fue el INS Enric Borràs de Badalona. Un grupo formado por tres chicos y tres chicas siguieron las directrices marcadas por la fundación y al final lograron el premio para seguir poniendo en práctica las enseñanzas alimentarias de que han aprendido durante el curso.

Bajo la batuta de las docentes Olga Montaña y Eva Mateos, estos estudiantes se tomaron en serio la alimentación. Olga cuenta como ha sido la experiencia. «Llevamos con este trabajo cinco años. Empezamos con la primera prueba piloto del programa TAS. Entonces estábamos en contacto directamente con la Fundación Alicia. Dos años después empezamos a trabajar con la plataforma on line». Para Montaña es importante que «se trabajara el tema de la alimentación ya que está explícitamente dentro del currículo de 3º de ESO . Y también es fundamental trabajar con estos alumnos de manera más dinámica y transversal y explicar los buenos hábitos alimenticios». Eva Mateos, por su parte, destaca los cambios que ha percibido en sus alumnos «Ahora en el recreo hay más alumnos que comen fruta. Creo que los estudiantes van incorporando estos hábitos sanos poco a poco».

«El programa TAS plantea retos que tienen que ir cumpliendo los estudiantes y tras ver las carencias que tienen nuestros alumnos se van reconociendo grupos de alimentos que hay que incluir en la dieta o incluso tomar menos» incide Mateos, que describe el germen del proyecto: «Entre todos pensamos ideas para mejorar la alimentación del alumnado del nuestro instituto. Hubo una lluvia de ideas... y logramos consensuar una propuesta».

Javier Garrido de 15 años y miembro del equipo ganador, cuenta su experiencia: «las profesoras nos contaron la iniciativa y nos gustó la idea de las clases prácticas y no estar tanto tiempo sentado. Este programa nos ha ayudado a trabajar en grupo . Fue muy divertido».

También Jessica Heredia de 14 años, y perteneciente al grupo, explica cómo desarrollaron su trabajo: «Hicimos muchas actividades tanto físicas como teóricas y excursiones . En la visita a la Fundación Alicia realizamos dos talleres y nos mostraron como es la comida de otros países».

Alla Mohamed no quiso dejar de resaltar que el programa también marca unos retos físicos, «aparte de las clases de gimnasia, participamos en una competición que consistía en ir en transporte público utilizando la geolocalización».

Andriana Hani resaltó los cambios que han realizado en sus vidas. «hemos notado lo que hacíamos mal: comíamos mucha comida basura, pero gracias a TAS hemos mejorado nuestra alimentación. Antes en los patios siempre comparábamos patatas, bollos... y ahora tomamos más bocadillos o fruta ». Para Alex Hidalgo resulta una pena no haber conseguido «cambiar los hábitos de nuestras familias. Pero poco a poco intentamos introducir alimentos más sanos como verdura o fruta».