Profesor: «Hay que elegir colegio pensando en que nuestro hijo se desarrolle y sea feliz, no en si va a ser astrofísico»

De todo ello hablamos con Guillermo Bautista , profesor de Estudios de Psicología y Ciencias de la Educación de la Universidad Abierta de Cataluña (UOC).

Hay progenitores que tienen pesadillas cuando tienen que elegir el colegio de su hijo. ¿Es una decisión tan trascendental como para que agobie tanto?

No debe ser así pero sí es importante y conviene que los progenitores pongan atención pero con tranquilidad. Es algo que no se decide el día antes ni un mes antes, sino que conviene ir pensándolo respecto a diferentes criterios.

¿Existe el colegio perfecto?

No existe escuela perfecta . La elección debe hacerse acorde a la tipología de la familia, cómo es el niño... En general todos los colegios tiene que dar mínima calidad. Pero no hay que olvidar una cosa: en el colegio no acaba todo. La familia debe mejorar la oferta escolar participando de forma constructiva.

Este año, los padres y madres se han quedado sin jornadas de puertas abiertas. ¿Es mejor o peor?

Creo que no es una ventaja porque siempre que se va a ver el centro escolar se ve todo con más criterio. Pero sí es cierto que, en esta ocasión, puede hacer que las familias fijen su atención en otros aspectos en los que quizás no se fijarían si hubieran ido a la jornada de puertas abiertas. Esta vez, se va con más pausa y hay veces que en esas jornadas se intenta vender muy bien el colegio. Ahora, hay que recabar otro tipo de información, de manera más pausada y fijándonos en cuestiones profundas.

¿Cuál es el aspecto clave que todo padre y madre deben tener en cuenta a la hora de elegir centro?

El proyecto educativo es muy importante. Pero antes la familia, desde mi punto de vista, debe analizar su capacidad económica . Yo estoy convencido de que la calidad no está acorde a lo que pagas. Otro factor clave es la distancia. A la larga, se convierte en un condicionante. Yo siempre recomiendo que el colegio al que vaya el menor esté en la comunidad en la que vive . Si no es así, se debe poner en una balanza los beneficios de sacrificar el desplazamiento.

¿Es importante la jornada intensiva o partida? Porque hay estudios que dicen que la jornada intensiva mejora el rendimiento académico

Con respecto a esos estudios, hay que ver realmente lo que se hace en esa jornada intensiva porque si el colegio ofrece una jornada partida distribuida de una manera diferente, quizás no pase nada. Una cosa es lo que sea mejor para los maestros o padres y otra para el niño.

Si a un menor le estás ofreciendo un contenido motivador, no va a querer ir al patio en dos horas. Si le estás dando una clase magistral en la que le estás soltando un discurso, lo más probable es que esté deseando que toque la campana para irse al patio. Por tanto, no depende de las horas sino de lo que se le ofrezca en ese tiempo : debe ser agradable para el niño en términos de eficiencia de aprendizaje .

Ante un hijo «vago» al que hay que cambiar de centro escolar porque en el que está la situación es insostenible, ¿qué colegio elegir?

Estos casos hay que analizarlos muy bien. Hay veces que esa reacción se debe a que el colegio en el que está no le ofrece una propuesta motivadora de aprendizaje . Por tanto, hay que buscar alternativas diferentes. También hay que tener en cuenta los posibles factores que provoca un cambio de colegio: problemas familiares, con los compañeros… Cuando se trata de edades avanzadas, hay que preguntarles y escucharles porque los amigos condicionan también mucho.

Decías que el colegio perfecto no existe. Tampoco el alumno perfecto. ¿Qué papel tiene el profesor en todo ello?

El proyecto educativo tiene que ser reflejo de los profesores . Son ellos quienes lo diseñan, quienes deciden en equipo, y ambos aspectos van de la mano. Si no fuese así, nos estarían vendiendo humo.

Estamos viviendo tiempos de incertidumbre. Los padres buscan el mejor colegio para su hijo para que tenga un futuro, pero el futuro es incierto. Antes no: si ibas a la universidad te asegurabas un buen trabajo. ¿Se educa hoy en día sin saber hacia donde?

Es el tiempo que nos ha tocado vivir. Por eso es vital entender el proyecto educativo del centro. Hoy hay que formar a una persona de manera integral para que tenga capacidad de adaptarse luego y prepararse para poder desarrollarse como persona en los todos los ámbitos de la mejor manera posible, con independencia del momento en el que se encuentre.

Tenemos que empezar a entender la escuela menos en clave de futuro y más de presente : un lugar en el que nuestros hijos estén bien y no pensando en si va a ser astrofísico o panadera, sino donde se desarrolle y sea feliz durante su educación. Eso le va a hacer prepararse muchísimo mejor para su futuro. ¡Pasan muchos años en el colegio! De hecho, en Smart Classroom Project investigamos sobre la mejora de los espacios de aprendizaje, los cuales han de ser repensados para llevar a cabo las nuevas metodologías educativas y sobre todo ofrecer bienestar físico y emocional.