Afectados por TDAH reclaman un protocolo clínico y otro escolar

Es verdad que, tal y como reconoce Fulgencio Madrid, presidente de feaadah , «en los últimos tiempos se han dado pasos de gigante, y que las instancias políticas, empezando por el Parlamento Europeo, con la presentación de su "libro blanco", y su inclusión en la Ley Orgánica de Mejora de la Calidad Educativa (LOMCE), están dando carta de naturaleza a un trastorno todavía es un gran desconocido para la sociedad , que no siempre aprecia las consecuencias que puede tener este trastorno en la vida diaria de una persona».

De esta forma, nueve comunidades autónomas han aprobado protocolos de actuación para el TDAH en el ámbito educativo o sanitario. Y algunas de ellas han elaborado protocolos de coordinación de los sistemas educativos , de salud, y de los servicios sociales para la detección, el diagnóstico y el tratamiento del TDAH . «La única forma posible y eficaz de tratar el problema», apostilla Trinidad Bonet, psicóloga especialista en psicoterapia por la European Federation of Psycologist Associations (EFPA).

Pero también es verdad, prosigue el presidente de esta Federación, «que siguen siendo mayoría las comunidades que carecen de los instrumentos para afrontar las principales carencias en la atención de las necesidades de las personas afectadas, porque todavía no han incorporado expresamente en su normativa este derecho básico de los escolares con TDAH».

Lo más importante sería que estos protocolos, añade el doctor Alberto Fernández Jaén, jefe de neurología infantil del Hospital Quirón de Madrid, «incluyan medidas para realizar diagnósticos anticipados. La identificación temprana del trastorno en la población infantil evitaría el fracaso escolar, que ya se cifra en el 30 por ciento. Los protocolos serían enormemente eficaces para conseguir que los niños con TDAH tengan las mismas oportunidades que otros ».

Por otro lado, dentro de la VII Semana de Sensiblización Europea se ha presentado también la campaña «Real Voices», que permitirá que las personas afectadas y sus familiares pongan de manifiesto lo que significa padecer este trastorno, así como compartir esta información con los distintos responsables políticos.