Moda sostenible: la tendencia en alza de reutilizar o alquilar vestidos de invitada

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Teniendo esto en cuenta, resulta lógico pensar que los invitados a dichos eventos busquen cómo optimizar y ahorrar en el gasto destinado a la ocasión y el estilismo suele ser la opción más recurrente. Y es que repetir modelito ya no está tan mal visto y cada vez son más las celebridades que dan ejemplo desfilando por las alfombras rojas con vestidos que ya han llevado, con piezas vintage de hace año o con vestidos prestados de algunas otras famosas. Una tendencia que incluso la propia Reina Letizia abandera optando por lucir en varias ocasiones un mismo vestido y dando ejemplo con su forma de utilizar las prendas de su armario.

Según el citado estudio de Klarna, 1 de cada 3 invitados apuesta por reutilizar, alquilar o pedir prestado su look, mientras que el 10% opta por la segunda mano. Si analizamos exclusivamente a las mujeres, estas cifras ascienden incluso algo más, alcanzando el 40% y el 12% respectivamente.

Look impecable, presupuesto ajustado y conciencia tranquila: este verano, los invitados lo tienen claro. La elegancia no está reñida con el ahorro y la sostenibilidad. «Estas cifras confirman el auge de la moda circular, incluso en eventos tan especiales como una boda. Y es que, esta práctica permite también encontrar una joya vintage o alquilar un diseño de la firma que siempre has deseado llevar», comenta Alexandra Colac, responsable de sostenibilidad en Klarna. «Los consumidores ya no quieren elegir entre estilo y presupuesto. Hoy, vestir de segunda mano es una elección consciente e igualmente atractiva», cuenta la experta.

Más allá del precio, hay nuevos cortes, tejidos y paletas de colores que ya están triunfando en las bodas este 2025. Así, las ventas de las prendas estampadas se han disparado, ya sean vestidos largos (+913%), midi (+237%) o, incluso, monos (+66%). Los prints florales y los estampados de inspiración vintage, tan populares en primavera, siguen marcando la pauta. Firmas como Dior y Monique Lhuillier han destacado estampados florales sobre tejidos livianos, que evocan un aire romántico y femenino.

Si hablamos de una tonalidad, el azul se corona como el rey de la temporada, con un aumento interanual del 549% en la venta de vestidos de este color. Fresco, elegante y visto en firmas como Chanel o Stella McCartney, además de haber sido elegido para eventos por celebrities como Emma Stone o Lupita Nyong'o. Además, los vestidos drapeados (+852%), plisados (+420%) y los cortes asimétricos (+630%) también son tendencia.

En una era donde se multiplican las bodas, pero no el presupuesto, el objetivo ya no es tener más, sino elegir mejor. Y en cuestión de estilo, las invitadas de hoy pueden presumir de tener tanta o más elegancia que las de ayer, pero con menor impacto económico y ambiental.