¿Cuál es el tono «nude» y por qué gusta?

Lo primero, definir el tono «nude». En España se ha calificado erróneamente como «rosa empolvado» o «rosa palo» pero, en realidad, el tono «nude» es el color «visón», o lo que es lo mismo, es ese color «tono piel caucásea» de la ropa interior. Para los que tengan un Pantone delante, es el tono 12-0911 TPX y los que le rodean. Támbien es importante resaltar que se escribe «nude» (porque es una palabra inglesa) y no «nudé».

El calzado «nude», en ante, charol o cuero, tiene como singularidad el alargar la pierna. Es un efecto óptico que proviene del hecho que no existen fuertes «cortes de color» entre el pie y el resto de la pierna. Pero este no es el único beneficio. Los «stilettos» «nude» se pueden combinar con cualquier cosa porque entonan con todo, desde estampados hasta tonos coloridos o neutros. Por lo tanto es el perfecto «zapato comodín». Además, al no llamar la atención, por la ausencia de estridencias, se pueden usar una y otra vez, sin que se note demasiado.

Quizás estos sean los motivos por los cuales se ha convertido en el color fetiche de reinas, princesas, y demás «royals», entre ellas nuestra Reina, Doña Letizia, la Duquesa de Cambridge, Katherine Middleton, su hermana Pippa, la Princesa de Mónaco, Charlene Wittstock y recientemente la mujer del presidente de Panamá en un acto oficial en nuestro país. ¿El único apunte de moda? Cada vez se lleva menos la plataforma, porque añade «peso visual» a la pierna. Mucho mejor sin ella, ya que estiliza y proporciona un look más moderno.

Y aunque el «nude» triunfe en los accesorios (los bolso cartera tipo «clutch» también se llevan), no lo hace en la ropa. El diseñador Juanjo Oliva no ha utilizado esta gama de color para su colección de primavera-verano 2015 porque El Corte Inglés (con el cual colabora para su firma Elogy) le ha comunicado que «en ropa el nude se vende muy mal».