Toño Sanchís, el ocaso del representante de las estrellas

Durante cinco años han protagonizado una batalla mediática y judicial . Para el recuerdo queda el ya popular «¡Págame!» -refiriéndose a los 600.000 euros a los que sí fue condenado- o las apariciones hasta hace poco de Sanchís en las que hacía oídos sordos a lo que la Justicia ha ido diciendo y con su verdad a veces imaginaria intentó ser una estrella como los demás. Cuando se comenzaron a descubrir estos tejemanejes de Toño con el dinero de Belén, fueron muchos los personajes que se fueron del lado del representante. Hasta llegar a un punto en el que su sociedad fue declarada en quiebra. Ocho años de relación con la «princesa del pueblo» en los que fue más que un mánager. «Ella estaba obsesionada conmigo, aunque no creo que estuviera enamorada. Muchas veces le di más prioridad a ella que a mi familia y eso me hace sentir mal», declaró Sanchís en una entrevista a la revista «Hoy Corazón».

La cruenta batalla entre ellos ha terminado esta misma semana con el desahucio del chalet en el que el exrepresentante vivía con su familia en Villanueva del Pardillo (Madrid). La vivienda la compró Belén en una subasta pública el 15 de abril de 2019. Una hora antes de que llegaran las autoridades, Toño la abandonaba con gesto serio, no sin antes dejar la llave puesta. Algunos medios presentes en el desahucio aseguran que la casa no ha quedado en muy buen estado e incluso apuntan a que Toño se habría llevado desde el plato de la ducha hasta los apliques y las bombillas . Ahora algunos se afanan por saber dónde se ha ido a vivir Sanchís.

Algunas vecinas ya habrían contactado con la prensa para ofrecer datos sobre el nuevo hogar. Tanto Sanchís como su mujer, Lorena, demandaron a algunos medios de comunicación por el acoso que sus hijos estaban recibiendo. Justo esta semana se han celebrado, por fin, dos de esos juicios. Durante estos cinco años la pareja no ha trabajado más allá de alguna aparición televisiva de él. Para muchos es una incógnita saber de qué han vivido este tiempo.

Poco después del desahucio, la tertuliana de «Sálvame» no pudo contener las lágrimas y rompía a llorar en su programa asegurando que ha sido un proceso muy duro y que ha tenido que desembolsar una gran cantidad de tiempo y dinero para lograr su objetivo de ver a Toño en la calle. Queda pendiente saber si, como ha dicho en alguna ocasión, usará la casa para hacerse un reportaje . La Esteban no piensa darle un respiro a Toño, y no descarta volver a emprender medidas legales contra él. Y queda por ver, en qué se reinventa él.