La segunda vida de Edward Snowden en Rusia: escritor, conferenciante y padre primerizo
El exanalista de la CIA ha solicitado la nacionalidad rusa para garantizar un refugio seguro a su familia
Edward Snowden y su mujer
El excolaborador de la CIA y de la Agencia de Seguridad Nacional estadounidense (NSA), Edward Snowden , que filtró a WikiLeaks miles de documentos clasificados desvelando prácticas ilegales de espionaje a través de internet, ha solicitado la nacionalidad rusa para garantizarse un refugio seguro ... lejos del acoso de la Justicia de EE.UU., que busca su procesamiento por la traición perpetrada. «Tras años de separación de nuestros padres, mi mujer y yo no tenemos ningún deseo de que nos pudieran llegar a alejar de nuestro hijo. Por eso, en esta época de pandemias y fronteras cerradas, vamos a solicitar la doble ciudadanía estadounidense y rusa», escribió el lunes Snowden, de 37 años, en su cuenta de Twitter. Se da la circunstancia de que, según su abogado, Anatoli Kucherena , la pareja tendrá su primer hijo a finales de diciembre y recibirá la nacionalidad rusa al nacer dentro del país.
La tramitación de la doble nacionalidad -tanto el antiguo analista de la NSA como su esposa Lindsay Mills conservarán la ciudadanía estadounidense- será posible gracias a que a ambos les fue concedida la residencia permanente en Rusia el mes pasado. «Lindsay y yo seguiremos siendo estadounidenses, educaremos a nuestro hijo con todos los valores de la América que amamos, incluida la libertad de expresión». Sin embargo, su fin último es poder regresar algún día a Estados Unidos para poder «reunir a toda la familia». Su padre, Lon Snowden, viajó a Rusia para visitarle en octubre de 2013.
El exespía conoció a Lindsay Mills, en internet. En diciembre nacerá su primer hijo. En la foto, Snowden besa el vientre de su mujer
Snowden lleva refugiado en Rusia más de siete años. Llegó a Moscú de incógnito procedente de Hong Kong el 23 de junio de 2013, tras escapar de su país de forma clandestina. Una vez en la capital rusa y por carecer de documentos válidos, no pudo salir de la terminal de tránsito del aeropuerto de Sheremétievo hasta cinco semanas después. Un poco más tarde, el 1 de agosto de 2013, le fue concedido asilo por un año, que luego prorrogó sucesivamente por tres años en 2014 y 2017.
Snowden conoció a su pareja a través de internet. Lindsay nació en Maryland, es bailarina, practica el pole dance y en su cuenta de Instagram pública -con 47.6000 seguidores- deja entrever su pasión por la fotografía. En 2017 se casaron en uno de los registros civiles de Rusia.
Actualmente, el filtrador de documentos secretos escribe libros y ofrece servicios como consultor a nivel mundial mediante videoconferencias sobre las tecnologías de la información. Pero no se deja ver directamente en público y su lugar exacto de residencia sigue siendo un misterio. Kucherena ha repetido hasta la saciedad que es mejor así por motivos de seguridad y sostiene que no vive en Moscú. Algunas publicaciones rusas aseguran que vive en una urbanización de las afueras de la capital rusa.
«Juicio justo» en EE.UU.
Snowden expresó en 2015 el deseo de regresar a Estados Unidos, pero con garantías de un «juicio justo». La Justicia de su país le acusa de espionaje, robo de secretos de Estado y de poner en peligro la seguridad nacional. Snowden publicó el año pasado sus memorias en un volumen bajo el título «Permanent Record» (Registro permanente). En ellas explica cómo colaboró en la creación del sistema de vigilancia global de la NSA y cómo se sumió en la crisis de conciencia que le animó a filtrar toda la información al portal WikiLeaks, que divulgó en 2010 más de 90.000 informes relacionados con acciones estadounidenses en Afganistán o cerca de 400.000 documentos clasificados sobre la guerra de Irak. Los delitos que se le atribuyen podrían costarle incluso la cadena perpetua. Washington pidió la extradición de Snowden, pero Moscú la denegó. El pasado agosto, Donald Trump manifestó estar considerando la posibilidad de un indulto.