La respuesta de Paulina Rubio tras ver su bochornosa actuación

La mexicana de 48 años, que aprovechó el directo para saludar irónicamente a Thalía , a quien siempre ha considerado su gran rival («le mando un beso a Thalía, mi compañera de toda la vida»), recibió enseguida un aluvión de críticas y comentarios sarcásticos sobre su estado de ebriedad. Evidentemente, el vídeo se volvió viral en cuestión de minutos, y se convirtió en trending topic en Twitter. Lo peor de todo fue que su intervención en directo formaba parte de la previa del concierto solidario contra la pandemia «One World, Together at Home», organizado por Lady Gaga y en el que actuaron estrellas de primer nivel como los Rolling Stones, Paul McCartney , Elton John , Celine Dion , Luis Fonsi o Taylor Swift .

«Es precioso cómo los famosos dedican su tiempo libre a instruirnos en tiempos de coronavirus. Hoy Paulina Rubio nos ha enseñado cómo drogarse en directo y que se note mucho», decía una usuaria en Twitter tras ver la peculiar aportación de «Pau» al recital solidario. Otro tuitero directamente se preguntaba (en inglés): «La cuarentena ha sido especialmente dura para nuestra buena hermana… ¿acaba de meterse una raya de coca?». Y no faltaron los que le echaron sorna: «¿Es mi idea o Paulina Rubio le quiere hacer la competencia a Maradona ? Y no me refiero en el fútbol».

Pero este lunes, lejos de recluirse y alejarse de los focos, Paulina Rubio decidió compartir una nueva publicación en la que reacciona a su propio vídeo, tarareando « Nada de esto fue un error », ríéndose de sí misma y pegando un buen trago a una botella de tequila. «Yo no soy esa mujer», canta en el post, haciendo un guiño a otro de sus éxitos musicales. Y no sólo eso: además ha compartido una entrevista antigua, en la que aseguraba que su abuela «decía y ha dicho siempre que siempre van a hablar de ti, y que qué mejor que lo hagan a que te ignoren».

No es la primera vez que Paulina Rubio protagoniza una controversia relacionada con el empinamiento de codo. En julio de 2018, actuó junto a Marta Sánchez y Belinda en un evento llamado «Ídolos» -una especie de festival revival de grandes éxitos de los noventa- celebrado en el Palacio de los Deportes de Ciudad de México. Gran parte del público se quejó de que entró completamente «desafinada y desentonada» y aseguraron que había tomado «una copa de más». Que se había hecho un « Amaia Montero », vaya. Unos minutos después de subir al escenario, olvidó parte de la letra que estaba cantando, y al terminar dejó plantada a Marta Sánchez en una rueda de prensa. «Paulina va a su bola», dijo con evidente cabreo la cantante española.