Reaparece la Princesa Haya para luchar por la custodia de sus hijos

Tras meses de especulaciones, por fin se pudo ver ayer a la princesa. La fotografía que acompaña estas líneas la recogieron ayer todos los medios digitales. Llegó tranquila. Lucía un sobrio vestido blanco y entre las manos se podían ver unas cuentas de lo que parecía una másbaha (un rosario islámico). Acudió al Tribunal Superior de Londres en compañía de su abogada, Fiona Shackleton . Allí tuvo lugar la primera vista preliminar por la custodia de sus dos hijos , Zayed (7) y Al Jalila (11), fruto de su matrimonio desde 2004 con el primer ministro de Emiratos Árabes Unidos y jeque de Dubái, Mohamed bin Rashid al Maktum (70).

Esta vista (que se reanudará hoy) tratará unicamente sobre el bienestar de sus dos hijos. Ni las condiciones de su separación ni el reparto de su ingente patrimonio privado se discutirán en esta audiencia, donde Fiona Shackleton volverá a batallar contra su rival más fuerte, Helen Ward , quien representa al emir . A las letradas se las conoce como «la magnolia de hierro» y «la gran dama de los divorcios», respectivamente. Su reputación las precede: Ward representó en el pasado a Bernie Ecclestone , y a Shackleton recurrió Diana de Gales para su proceso de divorcio.

Tal fue el revuelo causado en la mañana de ayer, que el inicio de este juicio estuvo marcado por un grupo de personas que se manifestaron contra el emir de Dubái en la puerta del Tribunal, tachándole de «asesino» y reclamando el «boicot» contra su persona. Al todavía marido de Haya de Jordania, no se le vió aparecer por los tribunales. Lo que sí se conoce es que acudió a la cita, que trató que los medios tuvieran acceso a la sala y que, además, volvió a expresar su voluntad de que el proceso de divorcio se dirima en Dubái. Esta premisa supondría la obligada vuelta de la princesa Haya al país, donde probablemente se le perdería el rastro, como ya ocurrió con la princesa Latifa y con las cuatro hijas de Abdalá de Arabia Saudí . Todas ellas en paradero desconocido .

Cuando se conoció que Haya de Jordania se había instalado en Londres tras su huida, la prensa británica comenzó a especular sobre la posibilidad de que Isabel II -quien era muy buena amiga de su padre, el Rey Hussein - le hubiera dado cobijo en una de sus residencias, pero lo cierto es que, desde entonces, vive junto con sus hijos en la casa que posee cerca del palacio de Kensington, valorada en 95 millones de euros.

Han sido muchas las hipótesis que se han planteado sobre la fuga de Haya de Jordania. Después de circular que la Princesa había conseguido salir de la «jaula de oro» de su poderoso marido gracias a la ayuda de un diplomático alemán, ha cobrado fuerza durante las últimas semanas que Haya de Jordania saliera del país gracias a uno de sus guardaespaldas , con quien al parecer mantendría un romance.

Lo único seguro es que la Princesa decidió salir de Dubái porque había descubierto detalles sobre la fuga de la princesa Latifa -una de las hijas del emir- que le llevaron a «temer por su vida». Aunque podría haber vuelto a Jordania, no quiso hacerlo para no provocar un conflicto diplomático con su país natal. Pese a la situación de su hermana, el Rey Abdalá se reunió este fin de semana con el P ríncipe de Abu Dab i .