Paz Padilla se enfrenta a un paparazzi por interrumpir su duelo

Pero durante todo el mes de agosto poco o nada se ha sabido de la presentadora de televisión, tan solo que ha pasado unos días en las playas de Zahara de los Atunes (Cádiz) junto a su única hija, Anna Ferrer , tratando de superar su «travesía por el desierto», tal y como ella describe este trance tras la muerte de su marido.

Un duelo que se vio enterrumpido hace unos días por la publicación en los medios de comunicación unas imágenes suyas juntoa su hija y la pareja de esta en la playa. Padilla no dudó entonces en utilizar su perfil en Istagram para mandar un duro mensaje al paparazzi: «Quiero darte las gracias por tu bondad, Tino Torrubiano , y a todos los que te rodean, Espero que algún día tengas compasión de mí, será señal de que tendrás amor en tu corazón», un mensaje que decidió borrar poco después al ver el revuelo que se había formado en la red social.

Ayer, la humorista volvió a sonreír gracias a su sobrina Valentina. Y es que la pequeña «me da la vida», como ha comentado la propia Padilla. A través de Instagram, la televisiva colgó un vídeo en el que aparecen junto a su caniche, Martina. Un post que ha causado mucha emoción entre sus compañeros, amigos y seguidores. «Uy que tía más graciosa. Me gusta escuchar tu risa amiga», le ha escrito Eva González.

Paz Padilla y Antonio Vidal se conocieron cuando tenían tan solo 14 y 17 años. Fueron novios durante un tiempo, pero sus caminos se separaron cuando la actriz se mudó a vivir a Madrid. A pesar de que terminó casándose con Albert Ferrer -padre de su única hija, Anna-, su amor de juventud regresó casi dos décadas después y en 2016 celebraron una romántica boda en la playa en Zahara de los Atunes. «Yo no me vuelvo a separar. Me he casado con el hombre de mi vida. Me ha costado volverlo a encontrar 20 años. Para mí lo es todo, me gusta su olor, es maravilloso todo, es un tío muy bueno, muy compresivo... Sabía que lo quería, pero no tanto », dijo entonces Paz Padilla.

El tumor cerebral que le diagnosticaron hace un año al abogado y, que Paz Padilla había mantenido en secreto -ni siquiera se lo contó a algunos de sus compañeros de «Sálvame»-, terminó con su bonita historia de amor , digna de cualquier guión de película.