De las orgías al alcohol: todos los escándalos de la biografía no autorizada que enfureció a Aretha Franklin
David Ritz escribió un libro que repasaba la vida de la cantante, una publicación que ella calificó de «auténtica basura» pero que se convirtió en todo un «best seller»
El fallecimiento de la artista Aretha Franklin ha sido un golpe para el mundo de la música. Una triste noticia que, sin embargo, ha puesto a los algoritmos de algunas webs a trabajar a toda pastilla, rescatando del pasado « Respect: The Life of Aretha Franklin ». Una biografía no autorizada escrita por David Ritz que corre riesgo de agotarse -de nuevo, ya en su día fue un «best seller», pese a que la diva la calificó de «auténtica basura» .
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Ritz presenta una historia trágica y sensacionalista de la familia de la cantante, que no solo afirma que su padre utilizaba la iglesia para organizar orgías, sino que afirma que Aretha «torturaba» a todo el que tenía alrededor con sus berrinches , que actuó borracha en varias ocasiones e incluso apunta a su padre, Cecil Franklin , como padre de dos hijos de la cantante, Clarance y Edward.
Según el autor, la familia desestructurada en la que nació la «reina del soul» -su madre huyó de casa por los malos tratos a los que era sometida- son la causa de su primer embarazo a los 12 años . Dos meses antes de su 13º cumpleaños, la niña, que ya despuntaba con su voz en la iglesia, dio a luz a un niño.
Ella nunca quiso hacer público quién era el padre del pequeño, por lo que los rumores apuntaron en dos direcciones: Donald Burk, un amigo de la escuela de Aretha, y su propio padre. A los 15 años llegaría su segundo embarazo, esta vez de un productor llamado Edward Jordan. Sin embargo, su segundo hijo también recibió el apellido Franklin.
El libro repasa varias relaciones tóxicas de la cantante, quien durante una época se refugió en el alcohol y, según las fuentes del autor, se subió en más de una ocasión ebria al escenario. En julio de 1984, tocó fondo tras el fallecimiento de su padre. Estaba sola, en la ruina, despidió a todos los que trabajaban con ella y canceló los conciertos que tenía por delante . En 1988, murió su hermana Carolyn por un cáncer de mama.
Fue una época oscura. En 1992, Bill Clinton la invitó a cantar el himno nacional en la Convención Nacional Demócrata. Un gesto con el que Aretha volvió al foco para recuperar el papel de diva, del que no se ha despojado hasta su fallecimiento.
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