Nadie olvida a Lady Di

La princesa Diana de Gales, fallecida en un accidente de coche en París en 1997, es recordada como un icono por los británicos por su trabajo para causas benéficas, que la hicieron ganarse un hueco en el corazón de todo el mundo, además de ser la madre de los Príncipes Guillermo, segundo en la línea de sucesión a la corona, y Enrique, sexto.

Los más interesados por la Casa Real, que se han desplazado a la localidad de Windsor, de 30.000 habitantes, para vivir la boda, recordaron a Diana de Gales entre los festejos que rodearon al enlace.

Marisa Arroyo , colombiana a caballo entre su país y la capital británica por trabajo, lleva dos días acampada en el pueblo para guardar un sitio en primera fila durante el desfile y vive emocionada todos los actos que incluyan a la familia real británica, ya que, según dijo, «es la monarquía más importante que tiene el mundo».

Arroyo recordó que estaba en Londres cuando se celebró el funeral de la princesa Diana, y ensalzó su figura, al tiempo que afirmó que el actual compromiso de su hijo pequeño con la exactriz le parecía «genuino», puesto que «están hechos el uno para el otro».

Markle, 36 años, era actriz protagonista en la serie «Suits» y es una feminista declarada que colabora con distintas causas humanitarias, utilizando su fama como plataforma para llegar a un público mayoritario, de la misma manera que lo hacía la madre de su ya esposo.

A este respecto se ha pronunciado José Valenzuela, un granadino afincado a las afueras de Londres, quien bromeó con que a Enrique le gustaba Meghan porque «hay algo que le recuerda a su madre». «Es un momento histórico», remarcó el andaluz.

A un tiempo, con el objetivo de honrar la memoria de Diana de Gales, el príncipe Enrique eligió a lady Jane Fellowes, hermana mayor de Diana, para un destacado papel durante la ceremonia.La tía del novio leyó este sábado un fragmento del Cantar de los Cantares de Salomón, uno de los textos bíblicos con el siguiente pasaje: «Levántate, amada mía, hermosa mía, y ven conmigo. Pues mira, ha pasado el invierno, ha cesado la lluvia y se ha ido».