Los líos de alcoba de Virginia Raggi, la nueva alcaldesa populista de Roma

Su fotografía en lágrimas ha ocupado las primeras páginas: Virginia Raggi, con la tradicional banda tricolor -como la bandera italiana- que llevan los alcaldes italianos en los actos oficiales , con traje azul y zapatos con tacón medio, se dejó llevar por la emoción hasta las lágrimas cuando se asomó al balcón de su estudio ante una de las vistas más bellas del mundo: los Foros Imperiales . A tomar posesión de su cargo este jueves llegó en un coche eléctrico con su futuro jefe de gabinete, Daniele Frongia , que la acompaña a todas partes. Ambos han desmentido que mantengan un affaire, como se ha rumoreado en los últimos días. Raggi accedió al Campidoglio, sede del ayuntamiento, entre gritos de «honesta, honesta». Al ser preguntada si desea que la llamen alcalde o alcaldesa, respondió: « Llamadme Virginia ».

Su primer día como alcaldesa lo compartió con sus electores en Facebook, mostrando oficina y primera reunión de trabajo, con vídeo incluido. Así, el nuevo aire del ayuntamiento , la conmoción, las lágrimas -quizás todo espontáneo, o todo estudiado- es la nueva frontera de la comunicación de Movimiento 5 Estrellas: sin intermediación, sin filtros, es suficiente con internet. Y es que, en la «revolución burguesa» -así la ha calificado el comentarista del «Corriere della Sera», Pierluigi Battista - que están llevando a cabo los «grillinos» -así son llamados los seguidores del Movimiento 5 Estrellas (M5E) del cómico Beppe Grillo - salen también a la luz incluso detalles de sus vidas privadas . Pretenden con ello ofrecer transparencia y dar idea de que el perfil del militante del M5E hoy es diverso del estereotipo del militante « grillino » extremista, gritón, insultante y descorbatado que se ha asociado en el imaginario político durante años a los populistas del M5E.

En una entrevista a «Vanity Fair», en mayo, Raggi llegó a confesar: «Sí, estoy en crisis con mi marido ». La alcaldesa se ve protagonista en los medios de comunicación por una crisis matrimonial que está aireando mediante un blog, en Twitter y en Facebook, su marido Andrea Severino , 43 años, técnico de radio, el primero de la pareja en apasionarse del Movimiento 5 Estrellas. Raggi, en su biografía de campaña electoral, no hablaba del marido porque ya antes había reconocido la crisis: « Vivo en el barrio Ottavia con mi hijo Matteo » (siete años), declaró.

El marido ha querido ser también protagonista y compartir el éxito de la Raggi enviándole un post en su blog que han reproducido todos los medios de comunicación: «¡Carta a la alcaldesa de Roma, mi mujer!». Así empieza su escrito Severino, quien le hace una declaración de amor en toda regla: «Has tenido un coraje de leona y una capacidad de explicar las cosas de forma sencilla, de manera popular y genuina. Son 21 años que te conozco, ahora para nosotros es un momento difícil, es inútil esconderlo, pero yo estaré siempre a tu lado. Trataré de protegerte lo más posible, incluso desde lejos». Y el final no puede ser más conmovedor: « Te echo muchísimo de menos. Tu marido, Andrea ». La carta, muy comentada en las redes sociales, no ha gustado a muchas mujeres, aunque se perciben dos bandos: quienes apoyan al técnico radiofónico y quienes lo critican por invadir de forma pública la nueva vida de la alcaldesa. Severini no se desanima y publica en Facebook: « Os doy cuenta de un mensaje que he recibido y que representa a todos los demás . Es de Patricia y no la conozco: ‘‘Habría pagado por recibir un post como el que tú enviaste a tu mujer. Gracias por haberlo compartido con todo el mundo”».