Lenny Kravitz relata en sus memorias la primera vez que fumó marihuana

Como parte de su promoción, la revista de música «Rolling Stone» ha publicado uno de los capítulos en los que Kravitz confiesa que Led Zeppelin y la marihuana le ayudaron a guiarlo en su carrera musical. «El hip-hop marcó un cambio de juego cultural, pero mi propio cambio de juego personal llegó por dos vías que chocaron en mi primer año de secundaria en Santa Mónica. La combinación rock and roll y marihuana me impulsó en una dirección completamente diferente», recuerda en el libro.

El primer día que fumó marihuana estaba con dos amigos: Shannon Brock , «mitad negro y mitad judío» y Derek , «un niño mitad blanco y mitad hawaiano», un joven que se ganó e cariño de su madre: «Mi madre vio su lado dulce. Mamá vio el lado dulce de todos. La mayoría de los padres de mis amigos estaban en la treintena, a diferencia de mi mamá, que tenía cuarenta y seis, y mi papá, cincuenta y uno. En mi casa, papá gobernaba con mano de hierro». «Tomé una bocanada y exhale. Shannon me dijo que lo aguantara más. Lo hice. Precisamente al mismo tiempo que golpeó mi cabeza, Dereck deslizó un casete en su radiocasete y esta vez algo cambió», confesó en relación a los primeros sentimientos que le surgieron cuando le dio la una calada al porro.

Tal y como relata, mezcla de marihuana y la canción Black Dog le hizo volar: «El cielo se abrió. El mundo se hizo más grande y más hermoso. Estaba jodido». Ese día se enganchó a esta droga : «La marihuana y el rock se convirtieron en mi dieta habitual», afirma en el libro. «Fumaba desde que me despertaba hasta que me dormía. Luego tuve que dejar de fumar, y lo hice».