Tensión familiar en el hospital tras la operación de Kiko Matamoros

Hoy, finalmente, ha llegado el día que tan señalado estaba en el calendario de Kiko. A las 12 de la mañana llegaba al Hospital Quiron de Pozuelo, acompañado por Marta López , su nueva novia, y su hija Anita , con un semblante tranquilo. «Estoy bien, más o menos tranquilillo . He estado un poco nervioso esta noche, pero tampoco demasiado», reconocía a su llegada al centro médico.

Al ser preguntado por el tiempo que pasará previsiblemente ingresado, reconocía que no estaba del todo claro: «Pueden ser unos tres días o así ». «Espero que vaya todo bien y ya habrá tiempo de verse con todo el mundo», añadía antes de dar las gracias por todo el cariño y los mensajes recibidos: «Agradecer a todo el mundo cómo está conmigo. Estoy muy contento».

Parece que el diagnóstico de su enfermedad ha acercado posturas con su hija Anita, que se mostró de lo más preocupada cuando su padre le dio la noticia. Solo ella y su hermana Laura Matamoros supieron la información directamente de su padre, pues no mantiene relación con el resto de sus hijos : Diego , Irene y Lucía .

Makoke , por su parte, apartó sus diferencias para enviar un mensaje de apoyo a Kiko, de quien se divorció hace cerca de un año. «Él sabe que yo estoy aquí. Sabe que puede contar conmigo. Me alegré mucho de verlo y decírselo a la cara», dijo en el plató de «Viva la Vida», visiblemente afectada.

Diego Matamoros se ha personado en el hospital, pese a que afirmó que si acudía a visitar a su padre sería siempre y cuando no estuvieran allí ni Makoke ni Anita. Esta última sí se encuentra muy pendiente de su padre y también Marta López, la novia de su padre, con quien tiene abierta una supuesta guerra judicial . Así, según informan desde «Sálvame», se trata de una «provocación» que genera una situación familiar muy tensa.

A pesar de que estaba previsto que la intervención comenzara a las cinco de la tarde y terminara sobre las siete, Marta López confirma desde «Sálvame» que ha durado apenas 45 minutos. También dice que Kiko «ha salido de quirófano y ha visto a sus hijos» (también a Diego), que está ya despierto y tranquilo en la habitación y que los médicos aseguran que todo ha ido bien y son optimistas .