James Hewitt, dispuesto a vender las cartas de amor de Lady Di

James Hewitt, el militar británico retirado que asegura haber sido amante de Diana de Gales durante cinco años, está dispuesto a vender las cartas de amor que la fallecida princesa le envió entre 1986 y 1991.

En una entrevista con la cadena de televisión CNN, Hewitt dijo que "estaría interesado" en vender las 64 cartas que recibió de lady Di, la mayoría de ellasdurante el tiempo en que participó en la Guerra del Golfo (1991) como comandante de una unidad de carros de combate.

Hewitt afirmó que ha recibido una "oferta por una gran cantidad de dinero" por las misivas, pero desmintió lo publicado por el diario sensacionalistabritánico News of the World, según el cual le han ofrecido unos 14,3 millones de euros por las diez cartas más "jugosas".

El ex militar indicó que las cartas están guardadas en "un lugar seguro" y que, en caso de venderlas, establecería condiciones sobre su posible difusiónpública.

"Habría ciertas condiciones. Eso sería lo ideal. Creo que (la venta) sería a un coleccionista privado. Creo que es importante entender que (las cartas) sono deben convertirse en importantes documentos históricos", manifestó.

El militar retirado relató que comenzó su idilio con la princesa Diana, muerta en un accidente de tráfico en París en agosto de 1997, cuando ésta le pidióque le diera clases de equitación.

Hewitt se refirió a la princesa como "una persona bella y encantadora que estaba falta de amor" y no quiso entrar en detalles sobre la intimidad de surelación, que se hizo pública cuando se disponía a regresar a Londres al final de la Guerra del Golfo.

La entrevista, emitida el miércoles por la noche, tuvo lugar un mes después de que el periódico británico The Sunday Times informara de una supuesta confabulación para comprobar si el ex militar, y no Carlos de Inglaterra, es el padre del príncipe Enrique, el menor de los dos hijos de Diana.

Según la extraña maquinación, una chica atractiva se acercaría a Enrique, de 18 años, para arrancarle unos cabellos con el objeto de obtener su ADN ycompararlo con el de Hewitt.

Consultado en su día por la prensa, Hewitt comentó: "No hay posibilidad alguna de que yo sea el padre de Enrique".

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