Los Janeiro pierden a su patriarca

Al menos, fue la cabeza visible del clan hasta que, en 2003, Carmen Bazán , su exmujer y madre de Humberto, Jesús, Carmen y Víctor , le pidio el divorcio y fue explusado de Ambiciones, la finca familiar por la que su hijo Jesulín, en 1990, había desembolsado 75 millones de las antiguas pesetas para asentar a toda la familia. En aquellas 300 hectáreas, con mansión de 2.000 metros cuadrados con 10 habitaciones, plaza de toros, capilla y ganadería propia, los Janeiro presentaron al mundo al tigre « Currupipi », sobrevivieron al tormentoso paso de una Belén Esteban ninguneada y que supo tomarse su venganza y, también, recibieron a María José Campanario , junto a quien el Jesulín encontró la estabilidad sentimental.

Antaño una piña, los Janeiro coparon durante años titulares de crónica rosa de este país. Sobre todo Jesulín, que abarrotaba plazas, protagonizando encierros con seis toros en los que, desde el tendido, cuando salía a hombros, llovían tantas flores como sujetadores de sus enamoradas seguidoras. Y allí estaba su padre, que había presenciado la faena en el burladero para llevarle a otra plaza o a un festival de música como el de Benidorm, donde cantó el célebre «toa, toa, toa…» tras cortar tres orejas en Cádiz.

El deceso de Humberto Janeiro se produjo sobre las 15:00 horas del domingo en el Hospital Universitario de Jerez de la Frontera. El falleciento fue avanzado por el programa «Viva la Vida» de Telecinco, donde se detalló que llevaba varios días ingresado en la UCI por unas úlceras en el pie que se complicaron, produciéndole un shock séptico y, luego, un fallo multiorgánico. Según este programa, se había barajado la posibilidad de cortarle el pie y parte de la pierna para salvarle la vida.

Hasta ese hospital había llegado desde la clínica privada San Juan Grande, donde acudió desde el domicilio que compartía desde hace años con Camila Naranjo . Acudieron a Urgencias porque tenía una infección en el pie provocada por su diabetes. Fue derivado al hospital de Jerez, donde tuvo una breve mejoría, puesto que los doctores le habían dado el alta de la UCI y subido a planta. Sin embargo, su cuadro médico empeoró de tal manera que nada se pudo hacer por él.

No era la primera vez que Humberto Janeiro se veía postrado en la cama de un hospital. Ya el pasado marzo tuvo que ser ingresado y antes había tenido más episodios. En 2009 se le implantó una prótesis de rodilla y ese mismo año fue cuando un problema cardíaco se solucionó con un marcapasos. Volvería al hospital en 2015, cuando, tras un accidente de tráfico, tuvo que ser intervenido de la cadera .

Problemas de salud aparte, el padre de Jesulín fue clave en la vida de su hijo como figura del toreo. De joven organizaba festejos taurinos y conciertos tanto en su Ubrique natal como en los pueblos cercanos de la sierra de Cádiz. Y durante un tiempo emigró a Suiza. Una vez que Jesulín comenzó a ingresar grandes cantidades de dinero, se dedicó a ser gestionar su patrimonio. Los malos tiempos llegaron tras la disolución de su matrimonio con Carmen, cuando salieron a la luz sus deudas con Hacienda. En 2006, estuvo implicado en la operación Karlos, una investigación sobre un fraude a la Seguridad Social para cobrar la incapacidad que salpicó a su nuera, María José Campanario, y a la madre de esta, Remedios Torres.

Los hijos del diestro habían confirmado la gravedad de su situación días antes: «Están esperando a ver si remonta pero lo ve complicado, ha tenido un problema multiorgánico», contaba Víctor Janeiro, uno de sus hijos, que también aclaró que toda la familia se encontraba en el centro hospitalario durante estos duros días. Humberto Janeiro estuvo casado hasta el año 2003 con Carmen Bazán . Fruto de su matrimonio nacieron cuatro hijos: el primogénito, Humberto Janeiro , el segundo Jesús, conocido popularmente como Jesulín , después nació Carmen Janeiro y a continuación el benjamín, Víctor .

Ya existía cierta preocupación por Humberto Janeiro desde hace unos meses. En febrero se habló de su deterioro físico e incluso se llegó a afirmar que necesitaba de unas muletas para poder caminar. El padre del diestro tenía varias patologías, entre ellas diabetes . De hecho en marzo tuvo que ser ingresado aunque su actual pareja, Camila Naranjo , aseguró que era algo sin importancia: «Él es el tío más fuerte que hay en España. No le pasa nada. Le salió una pequeña verruguita y le tienen que operar, ya está. Todo va bien y no hay por qué preocuparse. Tiene muchas cositas, pero está bien».

En 2009 también tuvo que ser hospitalizado de urgencia tras sufrir un trombo cerebral parcial que lo dejó inconsciente. Años después se fracturó la cadera en un accidente de coche en el que iba de copiloto.