Escándalo real en Noruega: habla el exnovio del chamán que sale con Marta Luisa

Desde palacio ya veían venir la relación de Marta Luisa con su chamán , pues ambos llevan un tiempo dirigiendo una empresa de conferencias llamada «La princesa y el chamán». Y es que Marta Luisa sí que utiliza el título real con fines comerciales, para promocionarse.

Por su parte, la realeza noruega se ha intentado mantener al margen de esta polémica relación pero, tras la repercusión de la misma, Haakon de Noruega , futuro heredero al trono, decidió pronunciarse en una entrevista concedida a la emisora de radio «NRK». «Estamos al tanto de lo que se está diciendo y escribiendo. Lo que queremos es hablar con mi hermana, principalmente sobre la posible renuncia a su título y sobre el trabajo que está desarrollando en la actualidad», reconocía entonces, pues han sido muchos los que han lanzado esta petición de renuncia.

Dentro de todo el escándalo, que parecía estar más calmado en las últimas semanas, el exnovio de Verret, un masajista californiano llamado Hank Greenberg , ha saltado a la palestra para hablar sobre este. Y es que, antes de conocer a Marta Luisa, era él quien acompañaba al chamán en sus charlas, que por aquel entonces daban juntos, y que recibían el nombre «El cielo y la tierra».

En una extensa entrevista para el tabloide «The Daily Mail», Greenberg ha dejado claro que no tiene « nada agradable que decir » sobre su expareja, pese a que le desea «todo lo mejor». Pero ha ido más allá y se ha referido a las relaciones «poco éticas» que mantenía Verret con sus clientes, entre los que se encontraba Gwyneth Paltrow , y que suponía un «claro conflicto de intereses».

«Me resulta muy difícil creer en él, basándome en mi experiencia personal. Nadie duda de que tiene talento y creo en su mensaje de que el amor es el camino correcto, pero ya no confío en el hombre », confesaba poniendo también en duda sus capacidades espirituales.

En una entrevista para el diario noruego «Dagbladet», Durek Verret contó que, para él, Marta Luisa «tiene un lado femenino y otro masculino» y que le resulta difícil meterla «en una caja». «¿Me atraen los hombres? Sí. ¿Me atraen las mujeres? Sí, pero se basa en el amor. Hay masculinidad y feminidad tanto en mujeres como en hombres, y defiendo el amor sin importar el género», añadía entonces.