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Enrique de Dinamarca no quiere ser enterrado junto a la Reina Margarita

La monarca ya había puesto manos a la obra a la construcción de un panteón conjunto

La Reina Margarita junto a su esposo, el Príncipe Enrique, balcón del Palacio de Amalienborg en Copenaghue EFE

ABC.ES

La última pataleta de Enrique de Laborde (83 años), conde de Monpezat y marido de la Reina Margarita de Dinamarca (77), ha sido la más grotesca de las muchas que ha protagonizado durante sus 50 años de matrimonio: desbaratar la ejecución del panteón donde ambos descansarían juntos una vez muertos. La Casa Real danesa acaba de confirmar que, efectivamente, el Príncipe Enrique , quien hace un año renunció al ejercicio de cualquier trabajo institucional, se niega a ser enterrado junto a su esposa.

El impacto de la noticia ha sido monumental, dado que la Reina ya había dado el visto bueno a la puesta en marcha de un cenotafio que se ubicaría en el interior de la catedral de la ciudad de Roskilde , uno de los templos más concurridos del país. Y para sumar un tono aún más siniestro a la historia, todos los detalles de la planificación de las obras de la tumba ya habían sido captados por una cámara de cine, pues iban a formar parte de un documental titulado «Sarcófago de una Reina».

La película, enfocada desde un punto de vista artístico, cuenta los pormenores de la preparación de la que sería última morada del matrimonio. Lo más sobresaliente es el sarcófago, de vidrio y sostenido por tres cabezas de elefante en plata, en el que el escultor danés Bjorn Norgaard ha estado trabajando durante los últimos siete años con objeto de albergar los restos de Margarita y Enrique de Dinamarca. Así pues, Norgaard podría haber trabajado en vano.

El sarcófago de la reina elaborado el vidrio sobre tres cabezas de elefante en plata EFE

No está al a altura

La contundente decisión del conde de Monpezat de no compartir su lecho de muerte con su compañera de vida ha obligado a la Casa Real danesa a pronunciarse sobre el asunto. «Sus restos descansarán en Dinamarca», se limitó a decir en un principio, aunque poco después tuvo que emitirse un segundo comunicado a cargo de Lene Balleby , la jefa de prensa. Según ha explicado, los motivos del Príncipe se deben a que no se encuentra a la altura de su esposa en cuanto a sus títulos, ya que no ha sido reconocido como Rey ni siquiera como monarca consorte, por lo que considera que no deberían descansar juntos.

Este nuevo gesto de Enrique de Laborde se suma a otros muchos con los que ha evidenciado su desacuerdo con el lugar que ocupa dentro de la realeza. «Dinamarca, que es conocida por defender la igualdad de géneros, parece que considera que los maridos valen menos que las mujeres», se quejó en su día. Desde la Casa Real, la portavoz ha asegurado al periódico danés «BT» que «no es un secreto que el Príncipe, desde hace mucho, ha estado descontento con su papel y el título que se le asignó en la monarquía danesa. Este descontento ha ido a más en los últimos tiempos».

A principios de 2017, Margarita de Dinamarca celebraba sus 45 años de reinado , que había iniciado tras la muerte de su padre, el Rey Federico IX y gracias a una reforma constitucional. El Príncipe Enrique, aristócrata de origen francés y diplomático de profesión -hasta que conoció la Reina-, se define como un gran amante del arte, la literatura y el vino .

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