El delicado estado de salud de Jaime Ostos

Al acto acudía con muletas y visiblemente desmejorado. Tiempo después era su esposa la que iba a un acto sin la compañía de Ostos, lo que volvía a hacer saltar todas las alarmas. La misma Grajal reconocía que Ostos no estaba bien. En noviembre tuvo que ser ingresado en el hospital Montepríncipe de Madrid como consecuencia de un edema agudo de pulmón a raíz de un lumbago. Después siguió siendo atendido por un equipo de profesionales en su casa. Había perdido 15 kilos y no tenía fuerzas para sujetarse en muletas, reconocía su propio hijo Jacobo.

Poco a poco, el diestro ha ido mejorando, aunque su estado de salud sigue siendo delicado. Así lo ha reconocido su mujer en una entrevista con Jaleos. «Jaime está un poco mejor. Esto es lento. Gracias a Dios ya anda», dice Grajal. Estas Navidades estarán todos juntos apoyando a Ostos: «La Nochebuena la pasamos en familia, con mis hermanos y mis hijos y sobrinos. Estarán todos los hijos de Jaime . Así pasaremos las Navidades».

En cuanto a los planes de Nochevieja, María Ángeles Grajal pide prudencia: «Todavía no sabemos qué haremos, no se pueden hacer planes más allá de 48 horas».