El via crucis de la familia Zorreguieta

A fuerza de tragedias, los Zorreguita se han mantenido muy unidos. No ha pasado ni un año desde que el patriarca, Jorge Zorreguieta , falleció a causa de una leucemia. La alargada sombra de la dictadura de Videla , para la que trabajó como subsecretario de Agricultura, no abandonó nunca al padre de la reina. De hecho, Zorreguieta y su esposa , Carmen Cerruti, no estuvieron en la boda de su hija con el entonces heredero al trono holandés para evitar la polémica.

Y es que la exposición de la joven Máxima y su famlia en la prensa los días previos al enlace hizo mella en los Zorreguieta. Y eso que la familia siempre ha hecho gala de su discrección, especialmente la Reina Máxima.

La polémica persigue a los Zorreguieta desde el mismo nacimiento de Máxima de Holanda. Su padre, casado con Marta López Gil, conoció a Carmen Zerruti en una época en la que el divorcio no era legal en Argentina . Junto a su esposa tenía ya tres hijas, pero decidió dejar a su mujer para empezar una nueva familia junto a Cerruti.

Precisamente Inés era la menor de los hijos de la pareja. Estaba muy unida a Máxima de Holanda -quien eligió a su hermana como madrina de su hija menor, la princesa Arienne - y trabajaba en Buenos Aires en un proyecto de urbanización de los barrios chabolistas de la ciudad.

Hace unos años, Inés Zorreguieta saltó a los titulares por sus problemas de depresión y de anorexia . Dos enfermedades que la obligaron a ingresar en un centro especializado. Esta madrugada -última hora de la tarde en Argentina-, su madre acudía preocupada a su apartamento, tras conocer que su hija no había acudido al trabajo. Carmen Cerruti se encontró el cuerpo de su hija y fue quien alertó a los servicios de Emergencias, que ya no pudieron hacer nada por salvarle la vida.