Boris Johnson, una vida llena de aventuras extramatrimoniales

En su carrera profesional como político, historiador y periodista, no solo hay un extenso currículum laboral sino también escándalos sexuales. Considerado como uno de los políticos más polémicos del país, cuenta con una larga lista de infidelidades que provocaron la separación en sus dos matrimonios.

El primer matrimonio de Boris fue con Allegra Mostyn-Owen , con quien compartió años de universidad en Oxford y con la que se casó en 1987. Su relación acabó de manera tajante cuando Allegra se enteró de la infidelidad de su esposo con Marina Wheeler , quien se convertiría en su segunda esposa.

La madre de Allegra, la escritora italiana Gaia Servadio , confesó la incompatibilidad que veía en la relación entre su hija y el exalcalde de Londres: «Boris es un hombre que necesitaba a alguien muy obediente y silencioso, que estuviera dispuesto a permanecer en segundo plano y crear una vida hogareña relajante, mientras le daba espacio para construir una brillante carrera. Mi hija no era ese tipo de persona» . Finalmente la relación llegó a su fin cuando Owen pidió el divorcio tras haber estado tres años viviendo separados.

En 1993, a las pocas semanas de firmar el contrato de separación con Allegra, Boris contrajo matrimonio con Marina , la que fue su amante durante su primer casamiento. Con ella permaneció 25 años y tuvo cuatro hijos: Lara, Cassia, Milo y Theodore . Sin embargo, a lo largo de más de dos décadas de relación, Johnson mantuvo varias aventuras extramatrimoniales por las que su esposa le echó de casa en dos ocasiones, en 2004 y 2010.

A pesar de todas las infidelidades, la abogada permaneció junto a su marido hasta que en 2018 finalmente se divorció. «Hace unos meses, tras 25 años de matrimonio, decidimos que era mejor para nuestros intereses separarnos. Después acordamos divorciarnos y ese procedimiento ya está en marcha», declaró la pareja en un comunicado.

Los periódicos británicos informaron de que Boris tuvo una relación de cuatro años con Petronella Wyatt , una escritora de sociedad e hija de la fallecida laborista Lord Wyatt . La pareja comenzó a salir mientras el presidente del Partido Conservador estaba aún con su primera mujer. La joven trabajaba en «The Spectator» como columnista, periódico en el que el ministro era editor. Durante esos cuatro años Wyatt se quedó embarazada en dos ocasiones, abortando en una de ellas de forma voluntaria y otra involuntaria, asunto del que su madre se enteró e informó a la prensa.

Como consecuencia de los fuertes rumores, Michael Howard , el entonces líder conservador, obligó a Johnson a dimitir como vicepresidente del partido y como ministro en las sombras por haber ocultado la verdad.

En 2006 el tabloide «News of the World», de Rupert Murdoch , «pilló» a Boris saliendo del apartamento de otra periodista, Anna Fazackerley , una noticia que fue publicaba en primera plana. Ella trabajaba para el «Times Educational Supplement» y él era ministro de educación, un sector en el que Ana era especializada y por el que probablemente se conocieron.

En 2010 salió a la luz el rumor de que Boris había tenido una hija con la consultora de arte Helen Macintyre . Por aquel entonces el primer ministro seguía con Marina la cual le expulsó del hogar al enterarse de tal infidelidad . El escándalo llegó tan lejos en la prensa que la artista acudió a los tribunales para evitar que los periódicos nombraran a Boris el padre de su hija Stephanie . Sin embargo, en 2013 un tribunal dictaminó que era de interés público informar que el político había sido padre fuera de su matrimonio por una aventura sexual.

Actualmente Boris mantiene una relación con Carrie Symonds , una joven de 31 años, 21 menos que el político. Hija de Matthew Symonds , uno de los fundadores de «The Independent», y Josephine Mcaffee , creció en el distrito de East Sheen y es una experta en comunicación política. Primero fue secretaría de prensa del partido de su pareja, y luego ascendió a directora de comunicaciones de los conservadores. Allí conoció a Johnson, en su campaña para ser reelegido como edil de Londres en 2012. Ahora, Carrie ha pasado a ser conocida como de FLOTUS por su relación con el Primer ministro, un concepto reservado para la primera dama de los EEUU, en este caso Melania Trump.