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Así fue la boda más cara de Rusia

El hijo de Mijaíl Gutseríev se ha casado en una celebración amenizada por Sting, Jennifer López y Enrique Iglesias

Jennifer López en la boda del multimillonario ruso INSTAGRAM

RAFAEL M. MAÑUECO

Todavía no se han apaciguado los ánimos en las redes sociales rusas tras conocerse los detalles del banquete de boda de Said, hijo del potentado ruso Mijaíl Gutseríev, con la bella estudiante de 20 años, Jadizha Uzhajova. Este grandioso evento social tuvo lugar el pasado sábado en Moscú en la fastuosa sala Safisa con la presencia de 600 invitados y algunas de las principales estrellas del pop mundial.

Los agraciados asistentes a la velada continúan todavía publicando sus fotos en Instagram y provocando comentarios de fascinación y arrob o, aunque la mayor parte son críticos y muestran más bien estupefacción. Parecía que, con la nueva crisis que padece Rusia debida a las sanciones, había pasado la moda de la ostentación y el lujo a raudales. Pero no.

Здесь не до своих фоток 😻😅

Una foto publicada por @elmira_baysultanova el

Las paredes del elitista restaurante Safisa aparecieron forradas de rosas de todos los colores. Un nutrido cortejo de cosacos caucasianos recibieron a los invitados a la entrada del establecimiento mientras atractivas azafatas ataviadas con el traje tradicional de Ingushetia les indicaban su lugar en la mesa. Un verdadero ambiente oriental propio de los cuentos de «Las mil y una noche». Entre los platos servidos predominó la cocina caucásica, los pinchos morunos y los dulces turcos, pese a las tensas relaciones con Ankara .

La novia, que estudia en la Facultad de Medicina y se propone ejercer como odontóloga, llevaba un vestido del modisto Elie Saab con incrustaciones de piedras preciosas y una cola de varios metros de longitud. La prenda pesa 25 kilos y su precio se desconoce, ya que Gutseríev se negó a revelarlo. La cifra que barajan los medios de comunicación rusos hablan de seis ceros por lo menos.

@enriqueiglesias

Un vídeo publicado por @elmira_baysultanova el

Una cantidad con siete dígitos recibió precisamente Sting (1,5 millones de euros) y Jennifer López (un millón). Enrique Iglesias , sin embargo, obtuvo sólo medio millón de euros, pero todo son conjeturas especulativas porque el potentado ruso tampoco quiso dar detalles. Se calcula que el convite le salió por casi 10 millones de euros.

Medios rusos sostienen que estuvieron también presentes celebridades como Beyoncé , Elton John y Patricia Kaas , pero nadie ha visto sus fotos en Instagram. La última en tomar el micrófono para deleitar a los asistentes fue la diva rusa del espectáculo, Alla Pugachova, famosa por su actuación en el Festival de Eurovisión de 1997. Se quejó de haber sido la que menos cobró, solamente 300.000 euros. Pugachova cree que su interpretación fue mejor que la ofrecida por López.

Gutseríev, dueño de la petrolera Russneft, de una emisora de radio y de otros muchos negocios, es natural de Ingushetia, por eso también estuvo en la boda el presidente de esta república del Cáucaso Norte ruso, Yunus Bek Evkúrov. Este peculiar oligarca ocupa el puesto 38 de acaudalados mundiales en la lista de Forbes. Se le calcula una fortuna de casi 2.500 millones de euros. Le gusta componer letras para las canciones de sus amigos cantantes.

Estrellas invitadas

La práctica de amenizar las fiestas privadas con estrellas mundiales del espectáculo se convirtió en algo habitual entre los magnates rusos en la pasada década. Por poco más de una hora amenizando un guateque en las mansiones de ricachones como Vladímir Potanin o Suleimán Kerímov, artistas como George Michael, Britney Spears o la fallecida Amy Winehouse recibieron más de un millón de euros. Su participación en estos y en otros muchos eventos sigue siendo para los oligarcas rusos un signo de distinción, pero esta costumbre había decaído en los dos últimos años. Gutseríev parece haberse propuesto reactivarla.

Los caprichos y excentricidades de los opulentos rusos les vienen de su precario pasado soviético, de las privaciones que padecieron. Entonces no se habían hecho ricos todavía, aunque la mayoría de ellos eran ya muy influyentes. De ahí lo ostentosos que son y la necesidad de mostrar que tienen dinero a espuertas. Sin embargo, el artista ruso, Yuri Loza está convencido de que «con esta boda, Gutseríev no ha conseguido que sean más quienes le admiran ». «Al contrario, dilapidando así el dinero ha dado un espectáculo lamentable», considera Loza.

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