Sarah Ferguson pierde más de 15 kg eliminando el azúcar y haciendo ejercicio

Al parecer, Ferguson decidió tomar medidas drásticas cuando, una mañana, comprobó que pesaba lo mismo que cuando había estado embarazada de su hija Beatriz (de 25 años en la actualidad). Esa fue la gota que colmó el vaso. «Siempre estaba enfadada, creía que nunca iba a perder peso, que había perdido el control. No me valía nada de mi ropa. Sólo pensaba en comer, me ahogaba en la comida», ha señalado la ex mujer del duque de York en «Hello!».

Por ello, contrató a un entrenador personal e inició un programa de pérdida de peso controlado. Concretamente, se impuso dos normas: nada de azúcar y un poco de ejercicio en la montaña. A su vez, mandó crear algunas variedades de té con «falsos» sabores dulces para evitar los antojos y las recaídas ocasionales.

La duquesa, que ahora se siente mucho más feliz consigo misma por haber logrado quitarse esos «kilitos» de más, ha querido señalar también que no ha llevado a cabo ninguna dieta rápida ni milagrosa. Ferguson, que ha señalado también que sufría con cada titular ofensivo con su peso que leía en la prensa, solicitará la comercialización de los tés que se crearon para ella con la intención de ayudar a todo aquel que quiera perder peso.