Jiménez, ministra y candidata, esta vez en Coslada

La ministra y candidata, en un ejercicio de gestión de tiempo y recursos, compagina sus tareas como ministra con las apariciones públicas en distintos actos en Madrid y, a pesar del malestar en el PSM ante su prematura campaña, acumula actos públicos en la Comunidad. El lunes, en las fiestas patronales de la virgen de Butarque en Leganés, y ayer en Perales de Tajuña, Jimenez daba la callada por respuesta a las acusaciones de miembros del PSM y continuaba recopilando apoyos para vencer a Gómez en las primarias.

Hoy, a la ministra le ha tocado visitar el otrora feudo de Tomás Gómez, Coslada, donde no ha dudado en hacer campaña interna para recaudar avales. Precisamente ha sido ahí donde Jiménez ha desvelado los cuatro pilares de su estrategia para arrebatar a Gómez la candidatura: sanidad pública, políticas sociales, educación, jóvenes y empleo son los ejes en los que quiere «centrar los emnsajes del partido, porque es ahí donde podemos ofrecer ilusión y esperanza».

Acompañada del alcalde de Coslada, Ángel Viveros, la ministra ha visitado la Concejalía de Salud y Consumo del Ayuntamiento de Coslada, donde ha asegurado que su carrera con el secretario general del PSM «está llena de afecto entre los militantes porque todos formamos parte de un mismo partido y compartimos el mismo proyecto». Según Jiménez, «se trata de que los militantes elijan quién está en mejores condiciones de ganar" los comicios autonómicos de Madrid el próximo año.

No en vano, la candidata ha aprovechado la presencia de los medios para intentar acallar las voces que la acusan de utilizar su agenda como ministra para hacer campaña por Madrid: «Me organizo muy bien, otros igual no», ha sentenciado la ministra para salir al paso de las acusaciones.

Del mismo modo, ha asegurado no sentirse «aludida por la cultura del pelotazo», expresión utilizada por Gómez para aludir a su compañera y rival, comparando un «proyecto sólido, compacto y concreto» desarrollado durante los tres últimos años, con la «cultura del pelotazo para ganar a última hora». No en vano, Jiménez sí se ha mostrado segura de que ese no es el «tono» que suele emplear el secretario general de los socialistas madrileños, del que ha dicho que «siempre ha actuado con respeto».

La ministra ha resaltado además que el partido «tiene enormes posibilidades de ganar en Madrid, y eso es lo que me mueve». Del mismo modo, ha apelado al voto «personal, secreto y libre» de los militantes, a quienes ha pedido su apoyo «desde el respeto y la confianza».

Por su parte, el alcalde de Coslada, Ángel Viveros, ha dicho que en el proceso de elecciones primarias le «mueve el apoyo de ganar Madrid», para lo que considera que la candidatura de Trinidad Jiménez es la que cuenta con mayores posibilidades, porque la ministra está avalada por su «gran trayectoria, eficacia y solvencia» que ha demostrado en aquellos cargos públicos que ha ostentado. "No hay duda de que con Trinidad vamos a ganar Madrid, y eso será bueno para los ciudadanos porque vamos a abandonar las políticas de regresión", ha concluido Viveros.

Del mismo modo, la ministra se ha referido a la visita del ex presidente del Gobierno, José María Aznar, a Melilla y ha señalado que «cualquier tipo de interferencia no ayuda a que se solucione el problema» y que este tipo de actuaciones impiden que el Gobierno español pueda trabajar «con la misma seriedad, discreción y prudencia» de siempre. «El Gobierno está desde el primer día actuando con serenidad, con solvencia, con cautela para solucionar un asunto desde el punto de vista que tiene que ser tratado, desde el punto de vista diplomático y de orden público», apostó.