Un testigo del caso Mediador declara que Navarro le pidió 32.000 euros por favores

Es un paso más en esta causa que se sigue en el Juzgado de Instrucción número 4 de Santa Cruz de Tenerife, donde constan una docena de imputados, la mayoría empresarios locales, así como los mencionados Tito Berni y Navarro Tacoronte y el general de División de la Guardia Civil Francisco Espinosa.

Recapitulando: los investigadores, a partir de la ingente cantidad de audios, fotografías y mensajes que atesoraba el mediador en sus teléfonos móviles, concluyeron que existía un modus operandi por el que Tito Berni daba indicaciones a su sobrino, entonces director general de Ganadería de Canarias y al mediador, sobre las granjas que debían visitar para captar ganaderos en apuros que se sumasen a una dinámica de mordidas a cambio, en teoría, de un despliegue de influencias con el que conseguirían contratos, adjudicaciones y eludir sanciones.

Pero sobrevuela otra sospecha. Que para conseguir esos fines extorsionasen a los mismos ganaderos amenazando con movilizar al Seprona de la Guardia Civil en su contra, tirando de la influencia del general Espinosa.

Y ahí entra este ganadero canario, titular de una de las explotaciones que Tito Berni encomendó al mediador que visitase en noviembre de 2020, como destapó este diario. No les debió ir muy bien, porque en un audio posterior el mediador le dice a Tahiset Fuentes que se la tiene «guardadita». «Como se le ocurra comentar... que corra», señala Navarro. Pero cuenta también que el ganadero «no es tonto» y sabe que puede movilizar al Seprona. Por eso el interés de los investigadores.

En su declaración ante la Guardia Civil, a cuya transcripción tuvo acceso ABC, el ganadero explicó que no había recibido ninguna inspección en su finca en las fechas de los hechos. También concretó que conocía tanto a Tito Berni, con el que no mantenía relación; como a su sobrino. A Navarro sólo desde diciembre de 2020, «cuando se presentó en compañía de Antonio Bautista», empresario de fotovoltaicas imputado en la causa, «y una tercera persona para ofrecerle la instalación de placas solares».

Le ofreció además «la recuperación de una subvención haciéndose valer de sus contactos políticos así como le mostró su cercanía con el general Espinosa», declaró el ganadero. Llegó a enseñarle una foto con él de uniforme «alardeando de tenerle de contacto». «A cambio, le requirió el pago de determinadas cantidades de dinero, llegando a solicitar 30.000 euros en una ocasión y 2.000 en otra».

Meses antes ya le había visitado Tahiset Fuentes, y aún así, Navarro después les citaría a los tres en el Parador de Fuerteventura. «Se intentó valer de su presencia para darle empaque a sus proposiciones», dice el informe. Según su testimonio, nunca llegó a aportar ni un euro. Se vio venir «un engaño».