Un testigo afirma que dio a la dirección de ETA la máquina que fabricó las placas del coche bomba que mató a Querol

Esa troqueladora fue utilizada para fabricar las placas falsas de matrícula que llevaba el coche que ETA robó en Madrid y luego hizo explotar al paso del vehículo en el que viajaba el magistrado Francisco Querol la mañana del 30 de octubre del año 2000. El conductor, Armando Medina, y el escolta miembro de la Policía Nacional Jesús Escudero, fallecieron junto a él, así como Jesús Sánchez, conductor de un autobús de la EMT que circulaba cerca de ellos.

El testigo acudía ante el titular del Juzgado Central de Instrucción número 5 de la Audiencia Nacional, Santiago Pedraz, que investiga la autoría mediata de aquel atentado. Ya en los atestados policiales figura Echezarreta como autor del robo de la máquina en un concesionario de Eibar en noviembre de 1999. Lo que apuntan los informes es que luego se la entregó a Txapote, en la cúpula de ETA aquellos años.

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Según informaron a ABC en fuentes presentes en la declaración, ha ratificado la sustracción y la entrega a la dirigencia de la banda terrorista, pero sin afinar a quién o quiénes iba destinada la troqueladora.

Los avances en las investigaciones de la Policía y la Guardia Civil y la documentación remitida por Francia involucran a Txapote y otros ocho dirigentes de ETA en la planificación y la orden de asesinar a Querol, a partir, entre otras pistas, de un documento con objetivos de la banda en el que figuraba el nombre del magistrado y donde se encontraron huellas digitales de varios terroristas.

Fue el comando Buruhauste de ETA el que reivindicó el atentado que, así, se atribuye Ana Belén Egües, Juan Luis Rubenach, Gorka Palacios y Oier Goitia, al quien la Audiencia Nacional sitúa como integrante en esas fechas.

En cuanto a la dirección, estaba integrada además por Juan Luis Rubenach Roig, Ainhoa Múgica Goñi y Juan Fernández Iradi, para los que el juez Pedraz ha pedido a Francia que le permita dirigir también esta causa contra ellos, como en el caso de Txapote.

Están igualmente en el foco Mikel Antza; Asier Oyarzábal, Vicente Goicoechea Barandiaran, Ramón Sagarzazu, Ignacio Miguel Gracia Arregui (Iñaki de Rentería), Soledad Iparraguirre (Anboto) y Juan Carlos Iglesias Chouzas (Gadafi), todos señalados por una querella de Dignidad y Justicia que buscaba profundizar en la responsabilidad de la cúpula.